Jerusalén, 30 jul.- El Gobierno israelí aprobó hoy en su reunión semanal un aumento de un punto en el IVA, incrementos en el impuesto sobre la renta y recortes en el presupuesto de todos los ministerios para hacer frente a la crisis económica global.
Las medidas recibieron en la reunión semanal del consejo de ministros veinte votos a favor y nueve en contra, del partido ultraortodoxo sefardí, Shas; más la formación que lidera el titular de Defensa Ehud Barak, Atzmaut; y uno contracorriente del ministro de Asuntos Sociales, Moshe Kahlon, del derechista Likud.
Al final del encuentro, Netanyahu aplaudió la aprobación de la "responsable" decisión que "preservará la economía y puestos de trabajo en Israel".
Sentado a su lado, el presidente del Banco de Israel, Stanley Fischer, respaldó los recortes y subidas de impuestos con el argumento de que "se habían encendido las luces de alarma".
Barak, en cambio, destacó en un comunicado el riesgo de que la austeridad "traiga una recesión en vez de evitarla".
Las principales medidas que se aplicarán son la subida del IVA de un 16 a un 17 por ciento, un aumento de un punto en el impuesto sobre la renta en los salarios medios y altos y de medio punto en los impuestos para empresarios y la imposición de una tasa especial para las grandes fortunas.
"Demandaremos más de los que tienen más y menos de los que tienen menos, pero no dañaremos las acciones que hemos tomado para rebajar el coste de la vida", dijo el primer ministro, que aseguró que unas 300.000 familias seguirán recibiendo becas de educación gratuita y cerca de 400.000 tendrán beneficios fiscales, informó un comunicado difundido por su oficina.
Netanyahu reconoció al inicio de la reunión que las medidas impuestas "no son fáciles", pero las calificó de "necesarias, moderadas y urgentes".
Además de la faceta recaudatoria, también habrá un recorte del 5% en los presupuestos de este año de todos los ministerios, que supondrá un ahorro de unos 700 millones de shekels (141 millones de euros o 172 millones de dólares) y que se rebajará a un 3% en el 2013.
Netanyahu resaltó que Israel ha evitado la crisis económica global y salvaguardado los empleos durante los últimos tres años, pero la situación "está empeorando", lo que le obliga a "tomar pasos adicionales" para proteger la economía y empleos en el país.
"Los gobiernos que no actuaron a tiempo, que no tomaron acciones firmes y no fueron responsables han causado un gran daño a sus ciudadanos", señaló antes de citar como ejemplo "lo que está pasando en España, Grecia, Estados Unidos y Europa".
La Asociación Médica de Israel, que agrupa a colectivos médicos y defensores de los pacientes, escribió recientemente una carta a Netanyahu en la que advertía de que imponer recortes en el presupuesto del Ministerio de Sanidad implicaría "una guerra contra la clase media y un duro golpe a los sectores más débiles de la sociedad israelí", informó hoy el diario Haaretz.
La asociación recuerda que el 40 por ciento de los gastos médicos se hacen frente con fondos privados y asegura en la misiva que la financiación pública no es necesaria para ofrecer unos servicios médicos sobresalientes, sino para "proveer los cuidados básicos que exigen las leyes del estado de Israel".
Israel empezó la semana pasada a implementar sus medidas de austeridad, con el anuncio sorpresa del incremento de un día para otro de los impuestos del tabaco y la cerveza, con el que espera recaudar mil millones de shekels (202 millones de euros o 245 de dólares).
Con estas medidas, el Ejecutivo tratará de mantener el déficit público, que se ha disparado hasta un 4,5%, por debajo del 3,4% planificado.
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