Japón busca copiar el modelo español de renovables tras el desastre de Fukushima

  • En los últimos meses, varias delegaciones del país nipón han viajado a España para conocer nuestro modelo de energía eólica, tanto desde el punto de vista técnico, como regulatorio y de primas. Detrás está el interés de reemplazar las centrales nucleares por los molinos de viento.

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R.Ugalde

El pasado 11 de marzo se celebró el triste primer aniversario del terremoto de Fukushima, una catástrofe natural que se llevó por delante miles vidas.

Pero podrían haber sido muchas más, si los sistemas de refrigeración de la central nuclear de esta costera ciudad no hubieran funcionado y hubieran dejado escapar todo el veneno radiactivo que tiene esta planta en sus entrañas.

Sin embargo, la amenaza persiste doce meses después, lo que ha hecho que la zona sea un auténtico desierto, con una zona de exclusión de 20 kilómetros impuesta tras la explosión del primer reactor, el 12 de marzo de 2011.

Consciente de este peligro, ya que el país está asentado sobre una zona de peligro sísmico, el Gobierno nipón ha girado drásticamente hacia las energías renovables y ha enviado a nuestro país varias delegaciones con el único objetivo de exportar modelo eólico español.

Detrás de estas visitas se abren oportunidades de negocio justo en un momento crítico para el sector dentro de España, debido a la moratoria impuesta por el Gobierno y cuyo resultado es que se congela la construcción de cualquier nuevo parque durante los próximos años.

En cambio, Japón ha decidido echar el cierre a las centrales nucleares y sembrar su geografía con parques eólicos. Como dato más significativo basta señalar que, frente a los 54 reactores que llegó a tener el país, ahora sólo hay operativos 2.

Además, el pasado mes de agosto, el Ejecutivo nipón aprobó una nueva regulación de impulso a las renovables basada en el modelo español de las primas (financiar la instalación y desarrollo de estos parques hasta que alcancen su madurez), que entrará en vigor el próximo 2012.


Varios encuentros

Las misiones niponas a España han sido varias, pero siempre con el denominador de intentar comprender las claves que han convertido a España en líder mundial del sector.

La Asociación Empresarial Eólica (AEE), la patronal del sector, ha jugado el papel de cicerone en todos estos contacto, con la vista puesta en poder aprovechar las oportunidades de negocio que prometen abrirse en Asia.

La primera de estas delegaciones procedía del Gobierno Metropolitano de Tokio y se centró en conocer cómo nuestro país había desarrollado su modelo eólico, con gran interés en los aspectos técnicos, ya que la elevada dependencia energética nipona hace que para ellos sean cruciales aspectos como la predicción de viento, la integración a la red o el bombeo.

Para hacerse una idea del consumo eléctrico del país, se puede recordar que consumen cuatro veces más que España, cuando su población es tres veces superior. Un reto que necesitan salvar teniendo en cuenta su particular climatología, orografía y los seísmos.

Pero, además, el país lleva una década inmerso en un estancamiento económico que obliga a su Ejecutivo a mirar con detalle la lectura financiera de esta apuesta por las renovables.

De ahí que la segunda visita nipona, realizada por The Institute of Energy Economics, centrara su interés en la retribución y en las relaciones del sector con el Ministerio de Industria, el Instituto para la Diversificacion y Ahorro de la Energía (IDAE) y la Comisión Nacional de la Energía (CNE).

Un trato que lleva meses en el filo de la navaja, debido al déficit de tarifa de más de 20.000 millones que acumula España y que ha llevado al Gobierno a modificar toda la normativa de renovables (con carácter retroactivo en la fotovoltaica), recortar las subvenciones y paralizar la instalación de nuevos parques.

Este cambio de las reglas de juego a mitad de partida ha concentrado el interés de las delegaciones de Japan Renewable Energy Foundation, Fujitsu Research Insititute, la Universidad de Tokio y la Federation of Electric Power Companies, que también se han sentado con la patronal eólica española para exportar el modelo.

Detras de estos contactos, está la oportunidad que Japón puede abrir para las empresas españolas, sobre todo, en un momento en el que se ven obligadas a buscar todo el negocio fuera.

Por el momento, los contactos siguen dando frutos y la semana pasada Alberto Ceña, director técnico de AEE, acudió a Japón invitado por la Japan Renewable Energy Foundation (JREF), donde presentó las principales características del modelo español.

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