De cobrar 0,75$ como barbero a dirigir un imperio en el mundo de la estética

  • A pesar de que abandonó la escuela para mantener al hijo que tuvo con 15 años, Jim Markham ha creado un imperio multimillonario.
Fotografía de Jim Markham, fundador de Colorproof.
Fotografía de Jim Markham, fundador de Colorproof.
Youtube.

De vivir en la pobreza a ser el fundador de cuatro exitosas empresas dedicadas al cuidado del cabello. Este es el caso de Jim Markham, un tejano nacido en Houston y criado por una madre soltera con pocos medios.

Jim abandonó la escuela muy pronto, ya que a la edad de 15 años estaba casado, tenía un hijo y tuvo que empezar a trabajar como barbero para mantener a su familia. Fue en Farmington, Nuevo México, donde comenzó a desarrollar, cobrando 0,75 dólares por corte de pelo, una profesión que le ha llevado a ser el fundador de cuatro empresas de estética. Entre ellas ColorProof, compañía que factura 14 millones de dólares al año.

El empresario ha reconocido en más de una ocasión que el secreto de su éxito está en el trabajo duro. "Desde el principio aprendí a depender de mí mismo y supe que el destino estaba en mis manos. Pero para ello debía buscar oportunidades y trabajar muy duro", ha confesado en una entrevista a 'Beauty Launch Pad'.

Pero también en el talento, porque comenzó a participar en concursos de corte y peinado de cabello y a ganar numerosos premios: el Campeonato de Nuevo México, el Campeonato de Colorado, el Campeonato del Suroeste, el Campeonato de Nueva York, el Campeonato Nacional… Y por el camino también fue aprendiendo que la combinación de una técnica de corte y peinado correcta con productos de calidad daba los mejores resultados.

Un momento clave en su carrera fue cuando, mientras estaba ganando algo más de un dólar por cada corte de pelo, leyó en la revista PlayBoy un artículo sobre el estilista de los famosos Jay Sebring, quien cobraba 50 dólares por corte de cabello y tenía una línea de productos para hombres. Voló a Los Ángeles para conocerlo, aprendió su metodología y tres años más tarde era el presidente de la compañía de Sebring y se había convertido en el estilista de famoso más buscado. 

Después de hacerse un nombre como estilista quiso conocer el negocio de los productos de peluquería, y comenzó a trabajar en compañías que desarrollaban, fabricaban y distribuían productos para el cuidado del cabello masculino. Tras aprender cómo funcionaban, Jim fundó una serie de exitosas compañías de cuidado del cabello como Markham Products, ABBA Pure & Natural y Pureology, que vendió a L'Oreal en 2007. Ese mismo año, Jim fue nombrado Emprendedor del Año de Ernst & Young Consumer Products.

Mostrar comentarios