Jodorkovski pide visado para Suiza, según Ministerio helvético de Exteriores

  • El antiguo magnate ruso Mijail Jodorkovski, recientemente liberado de prisión, inicio hoy ante la Embajada de Suiza en Alemania, donde se encuentra actualmente, los trámites para la obtención de un visado Schenguen.

Ginebra, 24 dic.- El antiguo magnate ruso Mijail Jodorkovski, recientemente liberado de prisión, inicio hoy ante la Embajada de Suiza en Alemania, donde se encuentra actualmente, los trámites para la obtención de un visado Schenguen.

Jodorkovski abandonó hace cuatro días la prisión de Rusia en la que se encontraba desde hace diez años, a la que ingresó por acusaciones de delitos económicos al frente de la petrolera Yukos, de la que era dueño y que le había convertido en el hombre más rico de su país.

El Ministerio suizo de Asuntos Exteriores confirmó a través de una breve nota que se recibió una solicitud a nombre de Jodorkovski en la embajada suiza en Berlín para un visado comunitario por un periodo de tres meses.

Agregó que la representación diplomática procesará esta solicitud en coordinación con la Oficina Federal de Migraciones de Suiza y que el proceso es confidencial.

"No se ofrecerá más información hasta que se haya tomado una decisión", indicó el ministerio.

A la consulta de porqué razón Jodorovski necesitaría un visado para viajar a Suiza si se sabe que las autoridades alemanas le han entregado uno válido por un año, un portavoz de Exteriores se limitó a responder: "su abogado ha solicitado un visado Schenguen para él y se examina esta petición".

Suiza no forma parte de la Unión Europea, pero sí del espacio Shenguen -al igual que Alemania-, del que forman parte un total de 26 países entre los que hay libre circulación de personas.

Jodorovski, considerado un preso político, ofreció hace dos días su primera rueda de prensa en Berlín, donde dijo, entre varias otras cosas, que su liberación no debe ser vista como una señal de que las cosas están cambiando en Rusia.

Dijo que si había que encontrarle un significado tendría que ser el que la sociedad civil puede hacer algo en la lucha por la libertad de los presos políticos.

Su puesta en libertad, pocos meses antes de cumplir su condena, fue posible por un indulto que le concedió el presidente Vladimir Putin por razones humanitarias.

El exmagnate, que siempre rechazó los cargos que se le imputaron, pidió el indulto con el fin de poder reunirse con su familia, principalmente con su madre, quien se encuentra enferma.

Jodorkovski financiaba a principios de la pasada década a la oposición al Gobierno de Putin.

Según la prensa suiza, la esposa de Jodorkovski, Inna, tiene una casa en Ginebra, donde varias de sus compañías, incluida Yukos, tenían operaciones.

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