En la actualidad la edad legal de jubilación es de 65 años para quienes acrediten 37 años o más cotizados o 65 años y 10 meses para quienes tengan menos de 37, pero al menos 15 cotizados (mínimo para acceder a una pensión contributiva). Desde el año 2013 la edad legal para acceder a la jubilación aumenta progresivamente cada año y depende de la edad del interesado y de las cotizaciones acumuladas a lo largo de su vida laboral.
El objetivo de la reforma, que se aplicó durante la legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero, es que en 2027 el límite de jubilación se sitúe en 67 años para quienes tengan menos de 38 años y 6 meses cotizados. Esto implica trabajar más años para acceder al 100% de la pensión. Sin embargo, hay trabajadores que pueden seguir acogiéndose al régimen anterior, incluida la edad legal vigente en esa norma, y acceder a la totalidad de la pensión sin acreditar los años exigidos tras la reforma.
Para quienes resulte de aplicación la legislación anterior a 2013, se mantiene 65 años como la edad legal para acceder a la jubilación. Se trata de una excepción que incluye la norma para los desempleados afectados por la crisis que no han tenido opción de volver al mercado laboral.
Para poder acogerse a esta opción el trabajador deberá estar desempleado desde antes del 1 de abril de 2013 y no haber vuelto al mercado laboral, estar inscrito en alguno de los Regímenes de la Seguridad Social, desde entonces.
También se aplica a las personas con relación laboral suspendida o extinguida como consecuencia de decisiones adoptadas en expedientes de regulación de empleo, o por medio de convenios colectivos de cualquier ámbito, acuerdos colectivos de empresa, así como por decisiones adoptadas en procedimientos concursales, aprobados, suscritos o declarados con anterioridad a 1 de abril de 2013, siempre que la extinción o suspensión de la relación laboral se produzca con anterioridad a 1 de enero de 2021.
Fecha límite para jubilarse con el sistema antiguo
En los casos para los que se reconoce la aplicación de la legislación anterior, se trata de una opción, pero no una obligación para el interesado. Así, cada trabajador podrá optar entre la normativa vigente en el momento de su jubilación o por la norma aplicada antes de 2013. En cualquier caso, hay que tener en cuenta que esta opción tiene fecha límite este año 2020, de manera que solo es válido para las pensiones que se causen antes del 1 de enero de 2021.
En caso de cumplir los requisitos anteriores, el interesado podrá acceder a la jubilación a los 65 años sin necesidad de tener más de 37 años cotizados como se exige en la actualidad. Esto supone acceder a una pensión mayor, ya que si se aplica el sistema actual, al no tener al menos 37 años cotizados, la jubilación sería anticipada, con la correspondiente penalización, a través de los coeficientes reductores, que eso supone.
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