Lisboa, 11 abr.- Manuela Ferreira Leite, quien fuera líder del partido conservador que preside actualmente el Gobierno de Portugal, criticó con dureza las últimas decisiones adoptadas por el Ejecutivo y lo acusó de "dramatizar" frente a la opinión pública.
En declaraciones divulgadas hoy por la cadena de televisión lusa TVI24, Ferreira Leite mostró su rechazo a la congelación del gasto público decretado por el Ministerio de Finanzas como respuesta al fallo del Constitucional, que anula varios ajustes aprobados en los Presupuestos de 2013 y que ahora deberán ser compensados.
Médicos, docentes y funcionarios han advertido ya del riesgo en que coloca a los servicios públicos esta prohibición de acometer cualquier tipo de gasto no previsto, que entró en vigor ayer mismo.
"No tengo dudas de que esta orden no tiene ningún efecto y sólo puedo entenderla como parte de la dramatización de este Gobierno. Es como si estuviésemos frente a una tragedia y la única solución fuese paralizar al país", criticó Ferreira Leite.
Secretaria general del gobernante Partido Social Demócrata (PSD, centro derecha) entre 2008 y 2010, fue candidata a presidir el Ejecutivo en las elecciones legislativas de 2009 pero perdió en estos comicios frente al entonces primer ministro socialista, José Sócrates.
Ferreira Leite, que fue ministra de Educación y de Finanzas en diferentes períodos y es considerada como una de las personas más cercanas al actual jefe del Estado, Aníbal Cavaco Silva, fue sustituida como líder de su partido por el hoy primer ministro luso, Pedro Passos Coelho.
La antigua líder del PSD restó importancia a la sentencia del Constitucional y recordó que el valor de las medidas anuladas -1.300 millones de euros- equivale al 1 % del gasto del Estado.
En su opinión, el Gobierno conservador -que cuenta con mayoría absoluta en el Parlamento gracias a la alianza del PSD con los democristianos- ha perdido una buena excusa para cambiar de rumbo, aliviar la austeridad y centrarse en políticas que promuevan el empleo y el crecimiento.
Además de prohibir cualquier tipo de nuevo gasto, Passos Coelho ya anunció el domingo que acometerá más recortes en educación, sanidad, Seguridad Social y empresas públicas, una vez que descartó volver a aumentar los impuestos.
Ferreira Leite también censuró la mención del primer ministro a un hipotético segundo rescate financiero por considerar que "lo peor" que se puede hacer en este contexto -de grave crisis que atraviesa Portugal- es "asustar a las personas", recalcó.
"Si precisásemos de un segundo rescate es porque ya había esa necesidad previamente, y no por causa del fallo del Constitucional", defendió.
La antecesora de Passos Coelho como máxima dirigente del PSD abogó igualmente por un mayor consenso entre los partidos políticos, dado que los problemas que afronta Portugal "son de interés nacional".
A las críticas al Gobierno de Manuela Ferreira Leite se le sumó otro miembro importante del PSD -y también próximo a Cavaco Silva-, António Bagao Felix, ex ministro de Finanzas y actual consejero de Estado que calificó la decisión de congelar el gasto público de "poco razonable".
Estas restricciones a nuevos pagos en las administraciones públicas serán igualmente protagonistas hoy de un debate parlamentario a instancias del Partido Comunista luso.
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