La bolsa española concluye una jornada volátil con un descenso del 0,48 %

  • La bolsa española cerró hoy con un descenso del 0,48 %, tras una jornada marcada por la volatilidad, influida por la decisión del BCE de mantener sin cambios los tipos de interés y pese al buen resultado de la subasta 4.763 millones de euros en bonos del Tesoro a medio y largo plazo.

Madrid, 8 nov.- La bolsa española cerró hoy con un descenso del 0,48 %, tras una jornada marcada por la volatilidad, influida por la decisión del BCE de mantener sin cambios los tipos de interés y pese al buen resultado de la subasta 4.763 millones de euros en bonos del Tesoro a medio y largo plazo.

El índice de referencia de la bolsa española, IBEX 35, perdió 36,6 puntos, el 0,48 por ciento, para cerrar en 7.624,1 puntos, con lo que en lo que va de año, las pérdidas acumuladas del selectivo ascienden a un 11 por ciento.

Tras sufrir el miércoles una caída de más del 2 %, el parqué español inició el día con un rebote que volvía a situar el IBEX por encima de los 7.700 puntos, pero inmediatamente se desinfló para adentrarse en un día volátil y lleno de altibajos.

El Consejo de Gobierno del BCE decidió mantener sin cambios los tipos en un 0,75 %, pese al debilitamiento de la economía europea.

Asimismo, el BCE dejó invariables la facilidad marginal de crédito, mediante la que presta dinero a los bancos durante un día, y la facilidad de depósito, por la que remunera el dinero.

La noticia no fue bien recibida en la bolsa española, que a partir de ese momento reanudó su descenso y perdió lo que había ganado en las primeras horas de la sesión animada por el buen resultado de la subasta de deuda pública.

El Tesoro español colocó hoy 4.763 millones de euros, más de los 4.500 millones previstos inicialmente, en tres emisiones de deuda a medio y largo plazo, a menor interés. Esta emisión permitirá previsiblemente completar las necesidades de financiación previstas para este año, que rondaban los 85.000 millones de euros.

No obstante, la prima de riesgo española -que mide el diferencial entre el bono español a diez años y el alemán del mismo plazo- subió desde los 431 puntos básicos del cierre del miércoles hasta 449 puntos básicos.

En su comparecencia habitual tras la reunión del órgano de gobierno del BCE, Mario Draghi, confirmó las malas perspectivas sobre la evolución económica en Europa y defendió las mejores condiciones financieras logradas gracias al anuncio del nuevo programa de compra de deuda soberana de países del euro.

Asimismo, los mercados siguen preocupados por una posible confrontación de poder en EEUU, con un presidente demócrata y un Congreso de mayoría republicana, y su influencia a la hora de pactar un recorte de gasto y subida de impuestos, el denominado "precipicio fiscal", que asciende a 600.000 millones de dólares.

Según Javier Galán, gestor de fondos de renta variable de Ahorro Corporación, el mercado español "tiene la sensación" de que en esta coyuntura de división de poder en EEUU puede ser más difícil alcanzar un acuerdo que resulta "vital" para la economía estadounidense y mundial.

La OPEP también contribuyó a incrementar el pesimismo económico al reducir su previsión de demanda mundial a largo plazo de petróleo, pero mantuvo el precio del barril de crudo de sus socios en torno a 100 dólares a medio plazo.

En la bolsa española, todos los grandes valores han cayeron excepto Repsol, que ha subió un 0,67 % tras presentar unos resultados financieros mejor de lo esperado, y Banco Santander se apuntó un 0,05 %.

Al margen del IBEX, las acciones de la aerolínea de bajo coste Vueling que cerró con una espectacular alza del 25,23 % después de que IAG, aerolínea surgida de la fusión de British Airways e Iberia, presentara una opa por el 100 % de su capital. Por el contrario, las acciones de IAG perdieron un 2,13 %.

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