La confianza de los consumidores lusos se desploma hasta su mínimo histórico

  • El nivel de confianza de los consumidores portugueses alcanzó este mes de octubre el valor más bajo de su historia debido a las negativas perspectivas económicas que afronta el país de cara al próximo año 2013.

Lisboa, 30 oct.- El nivel de confianza de los consumidores portugueses alcanzó este mes de octubre el valor más bajo de su historia debido a las negativas perspectivas económicas que afronta el país de cara al próximo año 2013.

Así se desprende de los datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE) luso, que sitúa este indicador en -61,1 puntos, un mínimo nunca alcanzado en los quince años que lleva realizándose esta encuesta.

Este retroceso refleja una caída de cinco puntos respecto a septiembre, cuando ya se rompió la tendencia al alza registrada por este indicador desde principios de año.

El desplome sufrido en octubre coincide con el anuncio del proyecto presupuestario del Gobierno conservador luso para 2013, y que recoge una "enorme" subida de impuestos, en palabras del propio titular de Finanzas, Vítor Gaspar.

Este incremento de las tasas se suma al incremento de la carga fiscal que se viene implementando desde 2010, y tiene por objetivo aumentar los ingresos públicos para permitir que Portugal cumpla con sus objetivos de reducción del déficit, pactados con la troika a cambio de su rescate financiero.

El INE señala que además de la evolución de la crisis en Portugal -para este año se espera una caída del PIB del 3 % y para el que viene se estima una recesión del 1 %-, también ha afectado a la confianza de los consumidores las negativas perspectivas respecto a "la situación financiera de los agregados familiares".

"En octubre, las previsiones sobre la situación económica del país, la situación financiera de las familias y el ahorro alcanzaron los niveles más bajos de las respectivas series", apuntó el órgano estadístico en un comunicado.

Detrás de esta preocupación se sitúa, asimismo, la elevada tasa de desempleo en el país, que ya supera el 15 % y que está previsto que sobrepase el 16 % en 2013, cifras nunca vistas en Portugal hasta ahora y que lo convierten ya en el tercer país con más paro de la Unión Europea, sólo por detrás de España y Grecia.

También empeoró de forma significativa el indicador que mida la confianza de los empresarios ("clima económico"), y que alcanzó este mes los -4,6 puntos, cuatro décimas peor que en septiembre y sólo tres por debajo de su mínimo histórico, que data del pasado mes de febrero.

Esta estadística recoge la opinión de los empresarios de la industria, la construcción, el comercio y los servicios, que coincidieron en mostrarse pesimistas sobre la evolución en 2013 de la demanda.

Precisamente la contracción del consumo en Portugal ha sido durante este año más fuerte de lo esperado por el Gobierno luso, lo que ha afectado también a los ingresos que recibe el Estado por vía fiscal, lo que ha dificultado que alcanzara sus objetivos en materia de reducción del déficit.

El país debe cerrar 2012 con un déficit equivalente al 5 % del PIB -originalmente esta cifra era del 4,5 %-, cuando en el primer semestre del ejercicio éste se situaba en el 6,8 %.

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