La inversión inmobiliaria alcanza máximos de 2008 impulsada por las socimis

Madrid, 29 oct.- La inversión inmobiliaria no residencial en España cerró el tercer trimestre con 5.038 millones de euros, el 34 % más que los 3.756 millones registrados en todo el ejercicio 2013, lo que supone el mayor desembolso desde 2008, gracias a las socimis, según los datos de BNP Paribas Real Estate.

De hecho, el mayor impulso a la inversión ha provenido de las socimis, que han traído hasta la fecha al mercado cerca de 2.000 millones de euros destinados a activos residenciales, oficinas y retail.

Teniendo en cuenta el origen internacional de los fondos de las sociedades de inversión inmobiliaria, socimis, un tercio de la inversión tiene una base nacional, siendo el resto capital extranjero.

Entre los inversores internacionales más activos este año destacan los norteamericanos, británicos, asiáticos y latinoamericanos.

En cuanto al tipo de activo, las oficinas han supuesto el 34 % del total impulsadas, fundamentalmente, por los procesos de venta de algunas carteras propiedad de gobiernos autonómicos.

Los centros comerciales "prime" representaron, por su parte, el 32 % del total, mientras que los alcanzaron el 20 %.

Asimismo, los parques logísticos protagonizaron el 9 % de la inversión durante los tres primeros trimestres y la previsión apunta a una mejora en lo que resta de año y a un incremento de la actividad durante el primer semestre, al menos, de 2015.

La participación de los locales comerciales "prime" en el volumen total de inversión se mantendrá, en tanto que la de los centros comerciales tenderá a descender en 2015.

Según el director de Inversión de BNP Paribas Real Estate España, Francisco Manchón, este año está siendo un ejercicio excepcional por lo que respecta a la inversión, si bien es cierto que un mercado en su momento más bajo en términos de rentas y valores capitales desde finales de los 90 ha supuesto una llamada al interés de quienes encuentran que los mercados alternativos en Europa están agotados.

El empuje del capital demostrado durante este año no parece que vaya a tener continuidad a partir de la segunda mitad de 2015, añade, para el que se espera un ejercicio más asentado en la realidad del mercado inmobiliario español.