Con el tirón económico aún en marcha y la fuerte creación de empleo, la morosidad de familias y empresas con la banca está mejorando y lo importante es que lo hace en un momento en que el crédito también tira. En concreto, el porcentaje de impagos del sistema financiero español se situó en octubre en el 8,22 %, por lo que se redujo a su nivel más bajo desde enero de 2012, según datos del Banco de España.
En un solo mes los créditos morosos bajan más de una décima y lo hacen rompiendo, además, con las alzas registradas en septiembre y agosto. En concreto y a cierre de octubre el volumen de impagados cayó hasta los 102.946 millones de euros (1.059 millones en relación al mes previo). Al mismo tiempo, los créditos totales concedidos al sector privado se elevaron hasta los 1,252 billones desde los 1,249 billones que sumaban en septiembre.
Javier Urones, analista de XTB, considera que "el aumento del crédito al consumo en el último trimestre del año, debido fundamentalmente a unas mayores compras, puede contribuir de sobremanera a que la reducción en la tasa de morosidad durante los últimos meses se acelere hasta el punto de poder concluir el ejercicio por debajo del nivel del 8%".
Pese a todo, la mejora no esconde el hecho de que hogares y empresas siguen estando aún muy endeudados y de que el problema del elevado pasivo supone un importante lastre para la economía, puesto que en el caso de las Administraciones Públicas la situación es aún más delicada.
Si comparamos con los datos de octubre del año pasado para tener una perspectiva más amplia, la morosidad se reduce en más de un punto porcentual en comparación con el 9,27 % que marcaba entonces, y lo hace con unos datos más elevados tanto de créditos en general (1,270 billones), como de préstamos dudosos en particular (117.767 millones).
La tasa de mora marcó en España su máximo histórico en diciembre de 2013, cuando afectó al 13,61% del total de los créditos. En ese momento, la economía española acababa de salir de la recesión, con un tímido avance del 0,3% trimestral, pero la tasa de paro permanecía disparada, cerca del 26% (la Encuesta de Población Activa registró un nivel de desempleo del 25,73%). El desempleo está íntimamente ligado a la evolución de la morosidad, como vienen incidiendo los economistas a lo largo de la crisis.
La morosidad agregada del sector de bancos, cajas y cooperativas, que el Banco de España presenta separada de la correspondiente a los establecimientos financieros de crédito (EFC), también mejoró en octubre hasta el 8,29% desde el 8,40% de septiembre.
Los impagos acumulados por estos tres tipos de entidades cayeron por debajo de los 100.000 millones de euros por primera vez en siete años, es decir, desde noviembre de 2010 y se situaron en 99.451 millones de euros. Tanto bancos, como cajas y cooperativas se situó a cierre de octubre en 1,199 billones, lo que implica una mejora en relación al mes previo (1,196 billones del mes anterior).
Por último, la morosidad registrada en octubre por los establecimientos financieros de crédito (EFC), que se especializan en financiar grandes bienes de consumo, repitió registro, el 6,05% tras empeorar en septiembre frente al 5,85 % de agosto.
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