La Reserva Federal se mostró dividida en enero ante nuevas compras de bonos

  • La Reserva Federal de Estados Unidos se mostró dividida sobre la idoneidad de adquirir más bonos para bajar los tipos de interés en su reunión del Comité del Mercado Abierto de enero, según las actas de la reunión dadas a conocer hoy.

Washington, 15 feb.- La Reserva Federal de Estados Unidos se mostró dividida sobre la idoneidad de adquirir más bonos para bajar los tipos de interés en su reunión del Comité del Mercado Abierto de enero, según las actas de la reunión dadas a conocer hoy.

"Unos pocos miembros" observaron que en las condiciones económicas actuales, con elevado desempleo e inflación por debajo de los objetivos, "se podría justificar el inicio de compras adicionales de valores en breve", indican las actas de la reunión del 24 y 25 de enero.

Mientras tanto, otro grupo de miembros del órgano emisor opinó que esa medida se debería tomar sólo si las perspectivas económicas empeoran y si la inflación se mantiene por debajo del 2 por ciento.

La Reserva Federal ha acumulado fondos en valores a largo plazo para inyectar liquidez al sistema bancario y facilitar la inversión en un entorno de débil recuperación es Estados Unidos.

La mayoría de los miembros del Comité de Mercado Abierto opinaron en la reunión de enero que la Reserva Federal no debería comenzar a vender las carteras de valores que ha acumulado hasta 2015.

En el encuentro la Reserva Federal decidió mantener los tipos de interés "excepcionalmente bajos" hasta 2014, aunque hubo división de opiniones acerca de si se deberían dar subidas antes de ese año para evitar un aumento de la inflación.

Desde diciembre de 2008, el tipo de interés interbancario en Estados Unidos se ha situado cerca de cero.

Durante la crisis financiera de 2008 y 2009, la Reserva Federal respondió adquiriendo valores hipotecarios y bonos del estado para mantener bajo el precio del dinero y ayudar a impulsar la economía estadounidense.

En la reunión los miembros de la Reserva Federal indicaron que siguen preocupados por el retroceso de la actividad económica en el exterior y la crisis en Europa, así como por la situación del mercado inmobiliario en Estados Unidos, la caída de la financiación al consumo y los recortes presupuestarios.

Mostrar comentarios