La tormenta perfecta descarga esta semana en los mercados

Más madera en los mercados financieros. Los resultados de Goldman Sachs hoy y el déficit de Grecia el jueves se suman al caos en el espacio aéreo para poner a prueba el estado de salud de las bolsas mundiales, sometidas a continuas pruebas.

La primera piedra de toque llega hoy con los resultados de Goldman Sachs. La clave es si van a dar o no continuidad a las cifras mejores de lo esperado de Citigroup ayer y de JP Morgan y Bank of America la semana pasada. Unos resultados alentadores, como los del conjunto del medio centenar de compañías estadounidenses que han presentado beneficios hasta ahora: superan las previsiones una media de un 5%.

Tras la acusación de fraude realizada el pasado viernes por la SEC estadounidense por ocultación de información sobre un producto ligado a su negocio de hipotecas de alto riesgo, Goldman presenta hoy los resultados del primer semestre con algunas incertidumbres. La mayor es si sus competidores –sobre todo Bank of America y JP Morgan Chase- le han arañado cuota de mercado en el negocio de contratación de deuda pública, donde Goldman tiene una posición histórica de liderazgo.

En cualquier caso, el impacto de la acusación a Goldman, el banco de inversión que parecía el gran ganador de la crisis financiera, va más allá. La SEC está investigando si otros grandes bancos como Deutsche Bank, UBS o Merrill Lynch–ahora controlado por Bank of America- han incurrido en irregularidades parecidas. Por lo tanto, máxima presión para el sector bancario, al que los expertos recomiendan infraponderar mientras pasa la tormenta.

Como la que está descargando sobre las aerolíneas por el bloqueo del espacio aéreo. El impacto a corto plazo es muy negativo porque las pérdidas contabilizan una media de 140 millones de euros diarios. No obstante, a diferencia de la anterior gran crisis provocada por los atentados del 11-S, en esta ocasión se trata de un hecho puntual que no conlleva amenazas para el futuro del sector, como sí ocurrió en 2001, cuando se desató el miedo a volar y se tuvieron que intensificar las medidas de seguridad, con el consiguiente coste para las empresas.

Sin embargo, lo que sí saca está sacando a relucir la irupción del volcán islandés es la debilidad del sector aéreo, cuyas endebles finanzas están provocando fusiones masivas, como la protagonizada por Iberia y British Airways.

¡Qué viene el déficit griego!

La otra gran cita de primera magnitud llega el jueves de la mano de la publicación del déficit público griego. Son muchos los analistas que están previendo un dato peor del esperado. Mientras, el deterioro de los mercados griegos continúa imparable. Ayer, la bolsa fue duramente castigada y el diferencial con el bono alemán y los CDS–coste de cubrir el riesgo de impago- se fueron a máximo históricos.

El mercado espera el dato con el máximo recelo. Grecia se ha comprometido con Bruselas a rebajar su déficit público cuatro puntos este año, desde el 12,9% hasta el 8,7%, un porcentaje este último que el país heleno incluso cree que el ajuste se podría ampliar hasta alrededor del 6,5%. El jueves se demostrará hasta qué punto Grecia va en la buena dirección.