Atenas.- Si Grecia no quiere que la deuda la ahogue, tendrá que tomar medidas decididas. Ese es el mensaje que la UE lanzó hoy al Gobierno griego a través del comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, que pidió en Atenas cambios estructurales y más medidas para sacar al país de su endeudamiento.
"Controlen su deuda o la deuda los controlará a ustedes", advirtió en rueda de prensa en Atenas el responsable comunitario, quien recordó también que la eurozona "está basada en solidaridad y en el respeto de las normas comunes".
Rehn ha acudido a Atenas para tratar con las autoridades griegas sobre la estrategia para sacar al país del pozo de endeudamiento en que se encuentra, con un déficit del 12,7 por ciento del producto interior bruto (PIB) y una deuda acumulada que equivale ya al 113 por ciento de este.
El comisario, de nacionalidad finlandesa, se reunió con el primer ministro Giorgos Papandreu y con los ministros de Finanzas, Economía y Trabajo, así como con el gobernador del Banco Central.
Tras la ronda de contactos, Rehn fue claro: "Está en manos del Gobierno griego tomar la decisión sobre qué medidas va a adoptar", aunque insistió en que serán precisas reformas estructurales y más disposiciones de las ya anunciadas por el Ejecutivo socialista para reducir el déficit público al 8,7 por ciento del PIB este año.
"Tras consultas con el Gobierno, vimos que el Plan de Estabilidad y de Desarrollo y las medidas adicionales anunciadas en febrero van en la dirección correcta, pero debido a los riesgos de los mercados macroeconómicos, son necesarias medidas de consolidación fiscal", dijo Rehn.
El representante comunitario afirmó que las recomendaciones del Consejo Ecofin (que integra a los ministros de Economía y Finanzas de los 27 socios de la UE) indican que el Gobierno griego "debe dar más énfasis a (el control de) los gastos y que las medidas deben ser de carácter más permanente".
Según algunos medios griegos, entre las medidas de ahorro que prevé adoptar el Ejecutivo socialista se considera un aumento de dos puntos del IVA, una subida del impuesto al consumo de bebidas, tabaco y carburantes y nuevos recortes del gasto público.
A ese respecto, Rehn recomendó a los partidos políticos y a la sociedad que respalden al Ejecutivo en su esfuerzo ahorrador. El pasado día 24, una huelga general paralizó al sector publico en protesta contra los recortes.
Rehn anunció que el próximo marzo el Ecofin analizará la aplicación de esas medidas y estudiará la estrategia para 2011 y 2012.
Pese a lo grave de la situación, Rehn dejó sitio al optimismo al asegurar que Grecia "logrará su meta" y destacó que "los mercados deberían recuperar su confianza en la economía griega".
Además, el funcionario comunitario recordó que la UE "tiene los medios para garantizar la estabilidad en la zona euro", con relación a quienes anuncian que los problemas griegos podrían extenderse a otros países que comparten la moneda única.
Rehn también quiso que el caso griego sirva de ejemplo para el resto de socios europeos y advirtió: "Es un gran reto para toda Europa y hay que invertir en un desarrollo sostenible y, al mismo tiempo, debemos aplicar la consolidación fiscal en toda Europa".
El primer ministro Papandreu, con quien se reunió hoy Rehn, tiene previsto viajar el viernes a Alemania para consultas con la canciller Angela Merkel sobre la situación de endeudamiento de Grecia.
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