Lara saluda el plan de lucha contra el fraude y exige más inversión pública

Zaragoza.- El coordinador general de IU, Cayo Lara, ha recibido hoy con buenas expectativas el anuncio del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de un plan de lucha contra el fraude, pero ha advertido de que, para llegar a un pacto global sobre economía, IU exigirá que se incrementen las inversiones productivas.

En una rueda de prensa en Zaragoza, Cayo Lara se ha referido a los anuncios realizados hoy por Zapatero en el Congreso de los Diputados sobre la situación económica, y ha dicho, sobre el plan de lucha contra el fraude, que espera que éste sea "realmente sincero" y que "aborde los problemas de fondo" de la economía del país, en el que "uno de cada cuatro euros no paga impuestos".

En cualquier caso, ha advertido de que este plan no concuerda mucho con la rebaja de la partida destinada a la Agencia Tributaria en los Presupuestos Generales del Estado y ha exigido conocer con qué medios, personales y materiales, se va a poner en marcha este plan.

Cayo Lara tampoco cree que el plan contra el fraude sea muy factible de aplicar si se cumple el recorte de gastos en la administración pública anunciado también por Zapatero y que supondrá que no se repondrán nueve de cada diez plazas de funcionarios que se retiren por jubilación.

Sobre la constitución de la comisión que encabezará la vicepresidenta Elena Salgado para intentar llegar a un consenso en materia económica con los grupos parlamentarios en el plazo de dos meses, ha dicho que IU intentará incorporar sus propuestas para dar una salida a la crisis "por la izquierda".

Entre ellas, potenciar la inversión pública e incrementar las políticas de empleo, dejar de favorecer a la banca, que ha sido la responsable de la crisis, y de privilegiar a los constructores, cuya actuación ha dejado "la generación de españoles más hipotecada" de la historia.

Otras de sus propuestas se basará en la política fiscal porque, según Lara, hay "margen" para establecer una mayor progresividad, teniendo en cuenta que la presión fiscal en España es del 30 por ciento del PIB, siete puntos por debajo de la media europea.

También se ha referido a las "recetas" del PP y ha lamentado que su única propuesta sea "rebajar los impuestos" y proponer que el recorte en la inversión pública anunciado por Zapatero (50.000 millones de euros en tres años) sea aún mayor.