Las autoridades de EEUU aceleran la investigación a las agencias de calificación financiera

La Securities and Exchange Commisision (la CNMV americana) reconocióeste jueves a la agencia Reuters que está acelerando la investigación a lasagencias de calificación de riesgo, a pesar de que se está encontrando conalgunos obstáculos.El lunes pasado, la empresa McGraw Hill, casa madre de laagencia Standard & Poors, reconoció públicamente que podría ser la primeraagencia en sufrir una denuncia de la SEC por haber cometido prácticasirregulares. El caso se refiere a un intercambio de mails, que ahoraestán bajo el control a la SEC y de un Comité del Senado, en los cualesdirectivos de S&P reconocen supuestamente que no habían obrado condiligencia al calificar una emisión de bonos. Estos bonos, en realidad eran loscomplejos productos financieros denominados CDO (Collateralized DebtObligations), que recibieron una calificación crediticia óptima en 2007, año enque estalló la crisis de estos productos financieros ligados a hipotecasbasuras.“Hay determinados tratamientos en la ley que son específicospara las agencias de rating  y que hacen que estos casos se conviertan enun desafío”, afirmó a la agencia Reutersun directivo de la SEC llamado RobertKhuzami. “Pero eso no nos va a detener en la investigación de una posibleconducta  irregular”, añadió. “Les estamos vigilando estrechamente”.Khuzami reconoció que es un trabajo fatigoso estudiar unoscasos que están basados en productos y transacciones complejas, y añadió queestán estudiando correos electrónicos, y encajándolos todos para saber si laagencia tenía conocimiento de malas prácticas.Por ejemplo, algunos correos electrónicos desenterrados poruna comisión senatorial, revelaban que los propios analistas de S&P teníandudas sobre la forma de calificar de su agencia a unos CDOs llamados DelphinusCDO 2007-1. Este producto financiero es concretamente el que está investigandola SEC.Se trataban de una serie de valores basados en hipotecas(títulos hipotecarios), que fueron empaquetados y vendidos como bonos.  Esdecir, los analistas estaban otorgando a ese producto un prestigio que notenía.Una de los analistas llamada Lauren Sprinkle afirmaba en unmail, con copia a varios ejecutivos de la firma, que 25 valores que componíanesa cartera, habían sido remplazados a última hora por valores aún peores. Peroa pesar de saber eso, S%P no varió la calificación original de esta cartera devalores ni la degradó.