Vitoria, 10 dic.- Los comités del grupo aeronáutico Alestis en Álava han expresado hoy su temor de que a corto o medio plazo se cierren las dos plantas de la firma en Júndiz y Miñano, con una plantilla de 215 personas, porque la empresa apuesta por las factorías que tiene en Andalucía.
Alestis, cuyo capital mayoritario pertenece al grupo vasco Alcor, cuenta con 5 plantas en Andalucía, 2 en Brasil y otras 2 en Álava, con un total de 1.700 trabajadores.
El pasado 29 de noviembre, Alestis presentó un expediente de regulación de empleo (ERE) de extinción que afecta a 312 trabajadores, de los que 40 pertenecen a las plantas de Álava.
El ERE está ligado a un plan de viabilidad, ya que la empresa se encuentra en un proceso concursal porque debe 64 millones de euros a sus principales proveedores, según los comités de Álava.
En una comparecencia de prensa, los presidentes de los comités de Júndiz y de Miñano han dicho hoy que temen el despido inmediato de 40 trabajadores de Álava y, a corto y medio o plazo el cierre de las dos plantas que hay en este territorio.
Han considerado que en las plantas vascas "no sobra nadie" y han recordado que las fábricas de Júndiz y Miñano "han sido siempre rentables", son "productivas", y todas las piezas que fabrican "están vendidas" a Airbus y Embraer, sus principales clientes.
En este sentido, han opinado que el problema está en que el grupo apuesta por sus plantas de Andalucía "por intereses políticos", ya que la Junta de Andalucía tiene casi un 20 por ciento del accionariado del grupo.
Además, Banca Cívica (Casajol) tiene el 15 por ciento, Unicaja el 14 por ciento, el Banco Europeo de Finanzas el 6,8 por ciento y Airbus, que tiene factoría en Cádiz, un 1,85 por ciento.
La presidenta del comité de Miñano, Blanca Díaz de Mendibil (ELA), ha indicado también que la dirección les ha traslado que el futuro de Alestis está en la fibra de carbono y en los grandes montajes de estructuras, cuando en las plantas de Álava se trabaja con piezas metálicas y montajes medianos y pequeños.
El presidente del comité de Júndiz, Patxi López de Armentia (LAB), ha pedido al Gobierno Vasco, a la Diputación foral y al grupo Alcor que defiendan un sector estratégico como el aeronáutico y que se involucren en este caso.
Por otro lado, han explicado que todavía están a la espera de que el juez les comunique oficialmente el ERE y se abra el período de consultas.
También han reclamado a la dirección que, en lugar de crear una mesa negociadora común, se pongan en marcha negociaciones del ERE en Álava por la incidencia del mismo en el País Vasco.
Por último, han anunciado que el miércoles se concentrarán delante del Parlamento Vasco, coincidiendo con el pleno de investidura del lehendakari, para denunciar su situación.
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