Los sindicatos piden a Urende se acoja a un ERE temporal para reducir despido

  • La representación sindical que negocia con la dirección de la cadena de electrodomésticos Urende, tras estudiar durante dos días las cuentas presentadas por la compañía, ha propuesto hoy que la empresa se acoja a un Expediente de Regulación Temporal del Empleo (ERTE) y no a uno de carácter definitivo.

Córdoba, 27 jul.- La representación sindical que negocia con la dirección de la cadena de electrodomésticos Urende, tras estudiar durante dos días las cuentas presentadas por la compañía, ha propuesto hoy que la empresa se acoja a un Expediente de Regulación Temporal del Empleo (ERTE) y no a uno de carácter definitivo.

Según ha explicado a Efe el secretario general de Comercio de la UGT, Antonio Vacas, el objetivo de la propuesta reside en "intentar salvar" el mayor número de puestos de trabajo posibles y "abrir un margen de maniobra" durante dos meses para llevar a cabo la negociación.

De esta manera, los empleados afectados por el ERE al que se quiere acoger la empresa del Grupo Sánchez Ramade, unos 450 en toda España, entrarían en una situación legal de desempleo en la que Urende se ahorraría los Seguros Sociales de los trabajadores y donde estos percibirían la prestación hasta un tope no superior a los 170 días.

Para Vacas, esta medida, presentada en una jornada que ha durado ocho horas con un receso de negociación, "no perjudica" a los empleados porque evita que los mismos consuman jornadas de desempleo una vez integrados en el expediente temporal y además evita que dejen de cotizar.

Por parte de la empresa, su portavoz, Juan Francés, en declaraciones a Efe, ha advertido que la compañía no tiene que comunicar "novedad alguna" y que el proceso de negociación "continúa abierto" al margen de esta propuesta.

Las negociaciones volverán a retomarse en la jornada de mañana a partir de las 12.30 horas en el centro logístico que la empresa tiene en el polígono de las Quemadas de la capital cordobesa.

La propuesta inicial de esta filial del Grupo Sánchez Ramade contemplaba indemnizaciones de veinte días por año de servicio para cada trabajador y el cierre de 16 de sus tiendas en toda España, algo que los sindicatos "no firmarán en ningún caso", recalca Vacas. Actualmente, Urende, donde trabajan a un total de 727 personas, se encuentra en situación de preconcurso de acreedores y mantiene una deuda próxima a los 180 millones de euros con la banca que intenta renegociar.

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