Cataluña es la comunidad autónoma que acumula más concursos de acreedores en el tercer trimestre del año, es decir, justo antes de celebrarse el referéndum ilegal del 1-O. Lo más llamativo de los datos que hoy publica el Instituto Nacional de Estadística (INE) es que entre julio y septiembre el conjunto de España registra un descenso de más del 16% en el número de empresas que por su situación se ven obligadas a recurrir a la antigua suspensión de pagos.
En concreto, el número de empresas que se declararon en concurso de acreedores en el tercer trimestre fue de 766. De ellas el 26%, un total de 198, tienen su sede en Cataluña. Según la Estadística de Procedimiento Concursal, los deudores ascendieron en total a 975, un 12,4% menos que en el mismo periodo del año anterior. Se redujo el número de empresas y, sin embrago, subió el de familias que se declaran en quiebra, un 4,5% hasta 209.
Comercio y construcción, los sectores más afectados
Dos de cada diez empresas concursadas tienen como actividad principal el comercio (21,4% del total), seguidas de la construcción (16,1%) y de la Industria y la energía (15,4%). Además, una de cada dos tiene
menos de seis asalariados, mientras que el 27% no tiene ninguno.
Del total de concursos, 713 fueron voluntarios (un 12% menos que en el tercer trimestre del 2016), y 53 necesarios (un 14% menos), mientras que por clase de procedimiento, los ordinarios se redujeron un 25%, y los abreviados, un 10%.
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