El Ministerio de Economía acaba de lanzar una propuesta de modificación legal que prevé desvincular los planes de pensiones privados del momento de la jubilación por la vía de dar libertad total a los ahorradores para rescatar los fondos aportados al mismo, siempre que éstos lleven más de diez años en el plan o el fondo de pensiones. Hasta ahora esa posibilidad sólo existía en situaciones excepcionales, como encontrarse en una situación de paro de larga duración, padecer una enfermedad grave o enfrentarse al riesgo de desahucio -una situación que se reguló de este modo al calor del debate social sobre estas situaciones en el momento más duro de la crisis financiera-.
La intención del departamento que dirige Luis de Guindos, que ha sacado este lunes a consulta pública un texto que servirá de base para la aprobación en los próximos meses por parte del Consejo de Ministros de un Real Decreto de Modificación del reglamento de planes y fondos de pensiones, es incrementar el atractivo de los planes de pensiones, especialmente para los más jóvenes, según han reconocido fuentes del Ministerio.
Los informes que maneja el Ministerio de Economía apuntan a la rigidez de los planes de pensiones como una de las causas que hacen que los jóvenes opten por otro tipo de instrumentos cuando se trata de sacar partido a su ahorro. Según fuentes ministeriales, la perspectiva de meter el dinero en un plan o en un fondo y no poder volver a disponer del mismo hasta dentro de 30 o 40 años supone una barrera insalvable a la hora de suscribir este tipo de planes.
La propuesta del Ministerio de Economía rompe por completo con esa rigidez, aunque 'en diferido'. La propuesta del Gobierno es que esta libertad para poder disponer de los fondos aportados a un plan de pensiones no entre en vigor hasta el año 2025 y se limite también a los fondos aportados que lleven más de una década en el plan. No habrá ninguna otra restricción. Se eliminará la causalidad actual y se podrá disponer de esos fondos con el objetivo que se considere oportuno, tenga o no que ver con el ahorro previsión.
"Se desnaturaliza el sistema"
Fuentes del sector de las instituciones de inversión colectiva consultadas por lainformacion.com no ocultaban su preocupación respecto a que la posibilidad de rescatar de manera incondicionada las aportaciones realizadas a un plan de pensiones pudieran resultar en una desnaturalización de este instrumento de ahorro previsión, al difuminar las fronteras que le separa de otros instrumentos de ahorro a largo plazo.
"No estamos de acuerdo con la reforma", aseguran estas fuentes. "Entendemos que se desnaturaliza el sistema y no va a aportar gran cosa en mejorar la competitividad de los planes y fondos de pensiones respecto a otros instrumentos de inversión. Ya se bajaron las comisiones en 2014 y las aportaciones apenas se han incrementado".
Desde la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco) se admite que ellos hubieran preferido limitar el alcance de las cantidades que se pueden rescatar a los 10 años, bien estableciendo un límite cuantitativo máximo o bien restringiéndolo a determinadas circunstancias.
La propuesta de Economía viene, además, en plena ofensiva de las entidades financieras y de las aseguradoras sobre la necesidad de impulsar el ahorro complementario para la jubilación ante la fragilidad financiera del sistema de pensiones público y cuando se anuncia una nueva ronda de recomendaciones del Pacto de Toledo.
Menos comisiones
La idea es que el texto inicia ahora la tradicional tramitación y que en un plazo aproximado de 6 meses entre en vigor la norma. De este modo, a partir de 2025 se abrirá una ventana de liquidez para que los ahorradores puedan disponer del dinero depositado en sus planes de pensiones al cierre de 2015, un montante que a día de hoy, según el Ministerio de Economía, asciende a unos 68.000 millones en planes individuales. No obstante, dado que cada año se materializan entre 4.000 o 5.000 millones como consecuencia de las personas que llegan a la edad efectiva de jubilación o que rescatan esos fondos por alguna de las razones antes mencionadas, los recursos que se podrían liberar cuando llegue ese momento serían de 20.000 millones.
El otro vector sobre el que quiere actuar Economía son las comisiones, actualmente topadas al 1,5% después de reducir ese máximo desde el 2% en 2014. La propuesta gubernamental pretende modularlas en función de la tipología de inversiones del fondo de modo que se amolde la comisión a pagar por el ahorrador a la complejidad y el riesgo de cada producto.
Bajo esta premisa, la comisión máxima que una gestora puede exigir por un plan de pensiones invertido en renta fija - en los que actualmente hay invertido unos 20.000 millones de euros - se reduciría en el escenario ideado por Economía del 1,5% al 0,85%, generando un ahorro del 60%. Los invertidos en renta fija mixta, el plan más habitual del mercado en el que actualmente hay invertidos unos 50.000 millones de euros, se reduciría del 1,5% al 1,3%, mientras que no habría cambios en los de renta variable, renta variable mixta y fondos garantizados. Según los cálculos de Economía, la comisión máxima del sistema pasaría en este escenario del 1,5% al 1,25%, al menos sobre el papel, ya que en la realidad son pocos los planes que cobran la comisión máxima del sistema.
El Ministerio ha hecho el cálculo del ahorro que este ajuste en las comisiones supondrá para los ahorradores que tienen invertidos parte de sus excedentes en planes de pensiones: 67 millones de euros anuales.
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