Madrid Central: una 'nueva hucha' para Carmena que arruina a los empresarios

  • Durante el periodo de prueba se han enviado 14.000 infracciones, que de haberse cobrado hubieran supuesto casi 1,3 millones de euros.
Carmena y Errejón
Carmena y Errejón
EFE

Tres meses después de su implantación Madrid Central ya ha dejado de estar en pruebas y comienzan las multas a los infractores de la normativa. La 'medida estrella' del ayuntamiento presidido por Manuela Carmena de restringir al tráfico el centro de Madrid, 472 hectáreas (barrios de las Letras, Sol, Palacio, Cortes, Embajadores, Justicia y Universidad), sigue presidida por la polémica desde que comenzó sus pruebas el pasado 30 de noviembre. El ayuntamiento asegura que el tráfico en la Gran Vía, por ejemplo, ha descendido un 25% y algunos estudios, como el de la Universidad Politécnica, hablan de un descenso del 38% en las emisiones de algunos gases contaminantes y de efecto invernadero.

Por lo demás, en general, los vecinos de la zona están "encantados" con la medida; los comerciantes y hosteleros dicen que les lleva a la ruina –la Plataforma de Afectados por Madrid Central cifra en un 13% el descenso de la actividad económica dentro de Madrid Central- y ya hay voces que dicen que la aplicación de las multas desde este sábado 16 de marzo responde al afán recaudatorio de Carmena y su equipo de Ahora Madrid. El candidato del PP a la alcaldía, José Luis Martínez Almeida ha sido claro: "Las multas son la constatación del fracaso de Madrid Central".

Madrid Central entró en vigor, en periodo de pruebas, el 30 de noviembre de 2018, pero solo desde enero, cuando el sistema de vigilancia estaba ya instalado, se comenzaron a enviar notificaciones informativas a los infractores. En apenas dos meses, el ayuntamiento ha enviado 14.000 notas informativas a otros tantos infractores de las restricciones. A 90 euros la multa, el consistorio podría haber ingresado, si las multas fueran de verdad como lo son a partir de este sábado, 1.260.000 euros.

"El ayuntamiento, por su afán recaudatorio, está dedicando miles de euros para la instalación de cámaras en Madrid Central y así poder multar al mayor número de vehículos, mientras que los agentes de movilidad apenas tienen recursos para realizar su trabajo", denuncia el sindicato CSIT Unión Profesional. "La medida precipitada de comenzar ya a multar sin que se hayan resuelto todos los problemas que crea Madrid Central parece que responde a que el ayuntamiento quiere comenzar a hacer caja", sentencia José Ferrer, uno de los portavoces de la Plataforma de Afectados por Madrid Central y gerente de Asociación de Empresas de Distribución de la Comunidad de Madrid (Aedisma).

A partir de ahora, sólo podrán circular por Madrid Central los residentes, sus invitados (un máximo de veinte al mes), los coches con etiqueta Cero Emisiones y Eco y los vehículos con etiqueta B y C que acudan a un aparcamiento público, además de suministradores, trabajadores y prestadores de servicios, entre otros. Quien no cumplan las numerosas limitaciones será sancionado.

Mientras, el ayuntamiento saca pecho y pone sobre la mesa los datos de descenso de la contaminación y otros como que la EMT ha aumentado los viajes a Madrid Central en 25.000 diarios y también hay un incremento de viajeros en el metro -gestionado por la Comunidad, en manos del PP, que se opone a Madrid Central-. "Por lo que podemos decir que crece el transporte público y el tráfico en la Gran Vía y en otras calles del área ha disminuido un 25%", según explica la concejal responsable de Medio Ambiente, Inés Sabanés, para la que "los datos son excelentes, todas las expectativas se están cumpliendo y se reducen las emisiones como nos pide la Unión Europea".

Mientras, la asociación de parkings Amega denuncia que muchos pequeños parkings de Madrid Central, unos 40, tendrán que cerrar por no poder hacer frente a la inversión necesaria para instalar cámaras en sus establecimientos para que se reflejen en los paneles informativos del perímetro de Madrid Central las plazas libres de cada parking. "Desde que entró en vigor Madrid Central hemos tenido unas pérdidas del 30%", aseguran desde la asociación. Por su parte, los comerciantes del centro de Madrid también hablan de "una reducción importante del negocio respecto a los mismos meses de 2018", que la Plataforma de Afectados por Madrid Central cifra en “el 13% y mucho más en la hostelería”.

En una encuesta llevaba a cabo entre más de 1.300 pymes, trabajadores y autónomos de Madrid Central por la Plataforma de Afectados se constata que "la preocupación entre las pymes, autónomos y trabajadores del Distrito Centro sobre el impacto negativo de Madrid Central en la actividad económica es generalizada. Si durante las Navidades, el 83,9% de los encuestados consideraban que Madrid Central afectaría bastante o mucho a su negocio, dos meses después, esta cifra se mantiene en el 84,1%". Y la "amenaza de la entrada en vigor del sistema de multas hace que la preocupación se eleve hasta el 89,61%". De acuerdo con los resultados del estudio, el impacto económico de Madrid Central durante enero y febrero, en comparación con estos dos meses de 2018, constata que la caída de facturación se sitúa en el 13,2%.

En cuanto al retroceso de las ventas, el impacto económico de Madrid Central, donde se estima que hay 30.000 empresas y unos 300.000 trabajadores, hace que el 82,05% del total de las empresas que operan en el Distrito Centro estén perdiendo dinero respecto a su facturación en 2018. Segregado por sectores, el colectivo de los agentes comerciales es el más perjudicado de todos los sectores en cuanto a su actividad económica con un retroceso en el volumen de facturación del 17,5% y un impacto negativo sobre el 93,3% de las empresas. El transporte ha sufrido una caída del 12,96% y afecta negativamente al 84,4% de las empresas, a continuación, la hostelería ha retrocedido un 13,1% durante enero y febrero y el impacto afecta al 81,1% de las empresas, y en último lugar, el comercio que sufre una caída del 11,5% y un impacto sobre el 76,4% del total de empresas.

Pero si, en general, comerciantes y empresarios se muestran en contra de Madrid Central, los vecinos no piensan lo mismo. "Las teorías apocalípticas carecían de fundamento y Madrid Central está funcionando bien. Los vecinos están encantados porque las calles que antes estaban llenas de coches y ahora se puede andar por ellas con tranquilidad. La vida en la ciudad ha mejorado”, asegura Quique Villalobos, presidente de la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM). Es el sentir, en general de los vecinos de Madrid Central, que consideran que su "calidad de vida ha mejorado”. Incluso, desde la Asociación La Corrala de Lavapiés van más allá: “Las multas deben de entrar en vigor ya". Lo hacen este sábado. Algunos dicen que Carmena solo quiere hacer caja.

Mostrar comentarios