De Avión a Tres Cantos... La brecha en las pensiones supera ya los 1.300 euros

El Gobierno de Pedro Sánchez ha puesto en marcha diversas iniciativas para reducir las diferentes brechas en las pensiones. En el caso de la de género, ha implementado un plus de maternidad que contempla 392 euros anuales por hijo -las mujeres cobran una pensión media de 876 euros frente a 1.314 de los hombres- y para recortar las diferencias entre las prestaciones más bajas y las más altas ha previsto que las pensiones mínimas suban ligeramente por encima del resto y el complemento a mínimos. Sin embargo, un repaso de la estadística de pensiones que elabora periódicamente el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, que dirige José Luis Escrivá, muestra todavía la profunda brecha que persiste entre pensionistas dependiendo de la localidad en la que están empadronados, que alcanza los 1.300 euros, unas diferencias que se asientan en la actividad laboral y el sector económico protagonista en los diferentes municipios.

Diez municipios mineros de Teruel, Asturias y León tienen las pensiones más elevadas, que van de 1.650 euros a los 1.776 euros. Los 341 jubilados de la localidad asturiana de Degaña son los que cobran esta considerable prestación, gracias a que buena parte de vida laboral la han dedicado a la minería, un sector de alto riesgo, que precisamente por eso prevé altas retribuciones y, en consecuencia, las pensiones máximas. Hullas del Coto Cortés inició su actividad en Degaña en 1919, con interrupciones de actividad, pero no fue hasta mediados de los 60 cuando los habitantes de esta pequeña localidad, que habían estado centrados en la ganadería y la agricultura, decidieron masivamente buscar empleo en la mina, que en algunos momentos dio trabajo al 75% del censo. 

Los siguientes municipios con prestaciones más altas son el turolense Estercuel -1.699 euros- y el leonés Igüeña -1.697-, Gargallo y Andorra (Teruel), Laviana (Asturias), Villablino (León), Ariño (Teruel), San Martín del Rey Aurelio y Riosa (Asturias). Estercuel, con apenas 200 habitantes, tiene una cuarta parte de su población cobrando una pensión y la actividad que se desarrollaron buena parte de estos jubilados fue la extracción de carbón de una de las explotaciones de Endesa. Mientras, la primera localidad no minera del ránking es la madrileña de Tres Cantos, con 47.000 empadronados y apenas 6.400 pensionistas. Con una renta neta media anual por habitante de 19.803 euros, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), el municipio madrileño está en el top 10 de las localidades en las que sus ciudadanos son más 'ricos'.

Tres Cantos, Majadahonda, Las Rozas y Getxo, entre los municipios medianos con prestaciones más elevadas y que rondan los 1.600 euros

Después de Tres Cantos se encuentra Domingo García, un pequeño municipio con apenas cinco pensionistas, en la campiña segoviana. La estadística no incluye localidades de menos de cinco perceptores de prestaciones contributivas para 'guardar' el anonimato de los pensionistas. Tras éste vuelven a surgir tres localidades mineras, véase Palomar de Arroyo (Teruel), Aller (Asturias) y Fabero (León), y después los municipios madrileños de Majadahonda y Las Rozas y el vizcaíno de Getxo. Solo los pensionistas de 293 localidades, de todos los tamaños, tienen prestaciones por encima de los 1.300 euros. Mientras el 77% de los 8.100 municipios que recoge la estadística acogen pensionistas con nóminas inferiores a 1.000 euros y 750, inferiores a 700 euros.

De los diez municipios con pensiones más bajas, siete son burgaleses, uno conquense, otro turolense y el último segoviano. En todos ellos -Padrones de Bureba, Santibáñez del Val, Miravete de la Sierra, Llano de Bureba, Susinos del Páramo, Jurisdicción de Lara, Mambrillas de Lara, Huérguina, Santa María del Invierno- hay menos de 12 habitantes y más de cinco. Los primeros municipios con más de 500 pensionistas cuyas prestaciones son extremadamente bajas son los orensanos de Sarreaus (571 euros), Ramirás (577) y Avión (578). Esta última localidad, en la comarca del Ribeiro, cuenta con apenas 2.000 habitantes censados y tiene poco menos de 800 pensionistas.

En invierno las calles de esta localidad están vacías, pero en verano 5.000 personas se alojan en el pueblo, muchos nacidos allí pero que emigraron hace décadas a México y Brasil donde hicieron grandes fortunas. Avión es el municipio de los ricos y de los contrastes, lleno de lujosas casas y mansiones que acogen enormes piscinas, pistas de tenis e incluso helipuertos que lindan con viejas casas de arquitectura popular, y pensiones extraordinariamente bajas, una parte debido al trabajo en la agricultura y la ganadería y otra a que muchos de los actuales jubilados cotizaron poco en España por su marcha temprana al extranjero. El país en el que trabajaron les ingresa también una prestación. 

En Avión no es excepcional ver  partidas de cartas y de dominó VIP, con jugadores como el millonario mexicano Carlos Slim y Olegario Vázquez Raña, nacido en el municipio orensano y propietario del Grupo Empresarial Ángeles, propietario de Hospitales Ángeles, Hoteles Camino Real, Grupo Financiero Multiva y Grupo Imagen y de medios como Imagen Radio, Excélsior, Excélsior Televisión e Imagen Televisión. La situación de las pensiones en Ourense, también en Lugo, es extraordinariamente preocupante. En la primera provincia hay menos de 20 municipios que tienen menos afiliados que pensionistas. 

Según los datos de la Seguridad Social, la pensión media de jubilación se sitúa en 1.250 euros, aunque existen diferencias notables entre las provincias. Solo dos provincias superan los 1.500 euros de media de pensión de jubilación. Son Bizkaia, con la nómina más alta (1.563 euros) y Álava (1.546). La mayoría de las regiones se sitúan en la horquilla de entre 1.200 y 1.400 euros de pensión media. Mientras, Lugo y Ourense son las únicas que no llegan a los 1.000 euros. La primera tiene una prestación media de jubilación de 941,39 euros; la segunda, 885,18 euros.