Máquinas que acarician las virtudes del hombre

  • Entender qué hacen las personas en una fotografía e interpretar estados de humor a partir de imágenes de vídeo, e incluso con los tonos y frecuencias de voz en una conversación, son virtudes naturales del hombre y de las cuales las máquinas con inteligencia artificial empiezan a adueñarse.

Amaya Quincoces Riesco

Madrid, 6 mar.- Entender qué hacen las personas en una fotografía e interpretar estados de humor a partir de imágenes de vídeo, e incluso con los tonos y frecuencias de voz en una conversación, son virtudes naturales del hombre y de las cuales las máquinas con inteligencia artificial empiezan a adueñarse.

Capacidades como la de reconocimiento de rostros (de forma anónima) por parte de las máquinas mediante imágenes de las que logran extraer grandes cantidades de información se están aplicando ya en servicios de gestión de la seguridad.

Por ejemplo, en partidos de fútbol, conciertos u otro tipo de concentraciones con gran afluencia de público, y también en la vigilancia de ciudades en general.

En temas de analítica, algunas máquinas son ya capaces de contar correctamente cosas complejas visualizadas en una fotografía o un vídeo, ha añadido en una entrevista con EFEfuturo Elisa Martín, directora de Tecnología de IBM España.

La proliferación de dispositivos móviles con cámaras e internet está disparando el manejo de datos multimedia (imágenes y voz), así como su posterior reutilización en funcionalidades hasta ahora desconocidas.

Precisamente IBM está inmersa en varios proyectos de investigación para el uso de este tipo de información en nuevos servicios, en colaboración con varias ciudades.

Por ejemplo con Dublín, la multinacional trabaja con un laboratorio "smart city" de análisis de grandes cantidades de datos en un convenio para compartir información pública e identificar su valor económico para la mejora de la gestión de los servicios públicos.

La capital irlandesa está facilitando datos de localizaciones y mapas, pero también del estado del tráfico e información de los servicios de transporte o del catastro, que están siendo utilizados para la creación de aplicaciones móviles en beneficio de los ciudadanos.

IBM también trabaja con la ciudad de Estocolmo; de hecho, en esta localidad puso en marcha el primero de una serie de proyectos de reconocimiento de imágenes a partir del cómputo por parte de máquinas del número de automóviles que pasaban por el arco del peaje digital de una autopista mediante la identificación de sus matrículas.

En el ámbito comercial, ha explicado la responsable de la firma, el análisis de datos obtenidos con tecnologías móviles de geolocalización y además en tiempo real se ha convertido en herramienta "prioritaria" para las tiendas, al permitir el envío de ofertas personalizadas a potenciales clientes, y en el momento justo.

Así, por ejemplo, si un comercio sabe que un posible comprador, del que conoce sus gustos y hábitos al disponer de datos personales sobre sus aficiones, está pasando junto a sus puertas, puede mandarle en ese mismo momento mensajes en su móvil con descuentos en uno u otro producto.

Ha explicado que los sistemas de geolocalización en dispositivos móviles junto con el análisis en tiempo real de datos están favoreciendo un retorno a las compras tradicionales en tiendas físicas, en aquellas de barrio en donde los productos se pueden tocar, oler y probar, y que en los últimos tiempos el "boom" del comercio digital había dejado algo de lado.

Asimismo, ha proseguido, se está aplicando a la vida real, más allá del juego para el que fue concebido, el popular sistema informático de inteligencia artificial watson, capaz de reconocer el lenguaje natural.

Sus funcionalidades se han trasladado a la "nube" tecnológica para que los desarrolladores se animen a crear nuevas aplicaciones en beneficio del desarrollo social.

Según la directiva, este sistema se ha extendido además al diagnóstico médico para tratamientos de cáncer, y la previsión es que en cinco años se integre en escuelas, de modo que sea "la clase la que ajuste al alumno y no al contrario, como hasta ahora".

De hecho, un novedoso proyecto piloto en esta línea, puesto en marcha hace unos meses en un poblado condado estadounidense, está demostrando "la capacidad de las ciudades de adaptarse al ciudadano".

La iniciativa, que consiste en un software con modelos estadísticos y enorme capacidad de análisis de información, con 170.000 estudiantes hasta el momento involucrados, está demostrando "el éxito" de trasladar la inteligencia artificial también a la escuela.

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