¿Merece la pena hacer un esfuerzo extra por un iPhone 5 con 64 GB de memoria?

El iPhone 5 se ha convertido en la niña bonita de la telefonía móvil. Todo el mundo quiere uno y quizás por eso es tan caro. Un diseño elegante, buenos materiales y un rendimiento excepcional son algunas de sus ventajas, pero no todas sus variantes son iguales.

Existen tres versiones según la capacidad de su memoria interna: de 16GB, 32GB o 64GB… y la diferencia de precio entre optar por una u otra no es poca cosa.

¿Qué supone realmente esta variedad? ¿Podemos hablar de iPhone 5 de primera, de segunda o de tercera categoría? Lo cierto es que no. Debemos tener claro que la memoria interna es sólo eso: una memoria para almacenar datos.

Es decir, en un terminal con 64GB podremos almacenar el doble de contenido (video, música, fotos, etc.) que en uno de 32GB y cuatro veces más que en otro de 16GB. Por lo demás, la velocidad, el rendimiento, la calidad de imagen… todo, exactamente todo, es igual.

Por supuesto que siempre es preferible tener cuanta más memoria mejor, especialmente porque los iPhone no permiten insertar tarjetas de memoria externas. Sin embargo, no debemos pagarlo a cualquier precio.

HelpMyCash ha realizado un estudio, a partir de los datos que proporciona su comparador de tarifas móviles, para determinar cuál es el coste real de la memoria extra en un iPhone, según cada uno de los operadores que comercializan los tres modelos. Éstos son los resultados:

Como podemos comprobar, la diferencia entre un iPhone 5 de 16GB y otro de 64GB puede ser radical. Especialmente extremo es el caso de Yoigo y su Tarifa Infinita 30, en la que el coste de esos 48GB extra se dispara hasta 263,24 eruos. Claro, que también es la que ofrece el iPhone 5 16GB claramente más barato.

¿Está justificada tanta diferencia? Teniendo en cuenta que las tarjetas SD de 64GB suelen rondar los 50 euros, su coste parece exagerado.

Por seguir con el ejemplo de la Tarifa Infinita 30 de Yoigo, uno podría conseguir un Samsung Galaxy SIV de 16GB por sólo 198,29 euros, y como este móvil sí permite tarjetas SD podríamos ampliar su memoria a un total de 80GB por sólo 50 euros más.

Es decir, que por unos 250 euros podríamos tener un smartphone con prestaciones muy similares (en algunos aspectos, incluso superiores) a las del iPhone 5 64 GB, pero con aún más memoria y por un precio dos veces y medio menor.

Si aún así sigues queriendo tener un IPhone, no te vendrán mal estas recomendaciones:

1. Analiza cuánta memoria usas normalmente. ¿Descargas películas en tu móvil? ¿Cuánta música tienes descargada físicamente? Piensa que 16 GB ya suponen un almacenamiento importante: no pagues por algo que quizás no vas a utilizar

2. Si tienes mucho material descargado, ¿no puedes traspasarlo al ordenador o a un disco duro externo? Puede valerte la pena la molestia para ahorrar ese coste extra

3. También puedes plantearte alternativas que te permiten almacenar contenido en la nube, como Dropbox o Google Drive. Dropbox te permite almacenar 100 GB por un coste de 9,99 dólares al mes (unos 7,52 euros). En dos años habrías pagado 180 euros por un servicio con más almacenaje y que, además, puedes usar desde cualquier dispositivo (móvil, sobremesa, portátil, etc.)

Para HelpMyCash, la diferencia de precio entre los modelos de iPhone 5 en función de su memoria no está justificada. Hay alternativas más eficientes y, además, existen modelos mucho más baratos y con características similares que permiten ampliar la memoria con tarjetas externas.

En todo caso, lo mejor es saber cuál será exactamente el precio del móvil al elegir un plan. Y para ello la forma más fácil y cómoda de hacerlo es a través de un completo y exhaustivo comparador de tarifas móviles.