Montoro advierte al PSOE y a IU de que "no es tiempo de pancartas"

Madrid, 13 mar.- PSOE e IU han rechazado hoy el objetivo de déficit pactado con Bruselas ya que "las políticas excesivas de consolidación fiscal conducen al estrangulamiento", a lo que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro ha respondido con la advertencia de que "no es tiempo de pancartas".

Montoro ha invitado a ambos grupos a sumarse al esfuerzo común en su turno de réplica durante el debate parlamentario sobre el techo de gasto de los presupuestos generales del estado y el nuevo objetivo de déficit, que ha pasado del 5,8 al 5,3 % del PIB.

Jaleado por la bancada popular, el ministro ha afirmado que "el discurso del miedo es el único argumento del PSOE en una circunstancia como la actual", algo que ha relacionado con las elecciones del 25 de marzo en Andalucía y Asturias.

"¿Les preocupa de verdad el objetivo de déficit o la política del corto plazo, donde dicen que están dispuestos a dialogar y el único diálogo que les escucho es agarrarse a una pancarta?", ha espetado Montoro al portavoz socialista de Presupuestos, Joan Rangel.

También le ha negado categóricamente que el Gobierno planee enviar al paro a 200.000 trabajadores de la función pública, subir impuestos "injustos" como el IVA o dejar en la incertidumbre el sistema público de pensiones.

Ha asegurado que precisamente las medidas presupuestarias que aprueba su Gobierno "garantizan las políticas públicas y el sueldo de los funcionarios".

Por eso, ha rogado al portavoz de IU, Cayo Lara, que "dejen de sembrar dudas" y le ha asegurado que "no es tiempo de pancartas", ya que la gravedad de las circunstancias actuales hace necesario el concurso de toda la sociedad para salir de la crisis.

Sin embargo, Lara le ha respondido que defenderán "en las instituciones y con las pancartas" su idea de Europa social y no dependiente de los especuladores.

Por su parte, el diputado socialista ha justificado su voto negativo en que "las políticas excesivas de consolidación fiscal conducen al estrangulamiento".

"Hemos pasado de una decisión soberana a la imposición de 5.000 millones de ajuste adicional que el Gobierno acepta", ha lamentado Rangel en referencia al anuncio que había hecho el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de que el déficit de 2012 tendría un límite del 5,8 % del PIB, cinco décimas por encima del finalmente pactado en el Eurogrupo.