Dublín, 12 nov.- El Banco Central Irlandés (ICB) anunció hoy que ha impuesto una multa de 3,5 millones de euros al Ulster Bank, filial del británico Royal Bank Of Scotland (RBS), por un fallo de sus sistemas informáticos que afectó a miles de clientes en 2012.
La penalización, que es la más alta jamás impuesta por la autoridad bancaria de este país por este tipo de infracciones, ha sido aceptada por el RBS, indicó el ICB en un comunicado, que calificó la situación para los usuarios de "trastorno inaceptable sin precedentes".
El fallo informático provocó que unos 600.000 clientes del Ulster Bank en la República de Irlanda y en Irlanda del Norte no tuvieran por ejemplo acceso a sus cuentas o no recibieran ingresos durante casi un mes entre junio y julio de 2012.
La multa, explicó hoy el ICB, ha sido impuesta después de constatar que la entidad bancaria fracasó a la hora de "instalar sólidos sistemas de gobierno" para hacer frente a posibles deficiencias en sus sistemas informáticos.
El banco emisor irlandés aseguró que la avería no solo causó "pérdidas generalizadas y significativas" a sus clientes, sino que también puso en duda "la confianza" en el "sector bancario minorista".
Hasta la fecha, el Ulster Bank, que lleva operando en Irlanda 176 años, ha pagado 59 millones de euros en compensaciones a miles de clientes en el norte y sur de la isla.
"Dado que la principal actividad comercial de la firma es la prestación de servicios financieros a clientes, la grave interrupción de ese servicio por culpa de un fallo informático es totalmente inaceptable", recalcó hoy el ICB.
Asimismo, el Banco Central justificó la imposición de una multa de tan alta cuantía subrayando "la gravedad" que la entidad da a este tipo de irregularidades.
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