¿Ley de protección de datos? A más de la mitad de los españoles les importa poco

  • El aluvión de mails ha sido notable en la última semana. Pese a todo, el 58% considera que facilitar datos es parte de la nueva economía. 
Reglamento de Protección de Datos entrará en vigor para toda la UE el 25 de Mayo de 2018
Reglamento de Protección de Datos entrará en vigor para toda la UE el 25 de Mayo de 2018
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El día 25 de mayo entró en vigor la nueva normativa europea de protección de datos (RGPD), que aumenta las garantías en el tratamiento de la información que cada ususario comparte con terceros. Los ciudadanos han sufrido en sus carnes el aluvión de 'emails' sobre la norma, en los que en unos sí y en otros no se les pide que renueven el consentimiento para poder seguir usando sus datos.

Ante el aluvión de correos electrónicos, el consejo de Borja Adsuara, exdirector general de Red.es y experto en la materia, "es no contestar de inmediato y aprovechar para hacer limpia", aclara. Explica que también puede ser una oportunidad de las empresas, que "pasaron de un buzoneo que costaba dinero a los spam a bulto, para que puedan cuidar uno a uno a sus clientes". Ahora se juegan algo importante, vital: la confianza. "Si la pierden, pueden ir al abismo porque no todas tienen la capacidad de Facebook para superar una crisis de este tipo. Los negocios de internet se basan en la confianza. Además, Facebook no tiene ahora un rival". 

El RGPD no es ninguna broma para las empresas. La nueva normativa prevé millonarias multas para quien la incumpla -hasta 20 millones de euros o el 4 % de la facturación-, y sustituye a una Directiva en materia de protección de datos personales que data de 1995, antes de que Google, las redes sociales y los teléfonos inteligentes cambiasen para siempre el mundo digital en el que nos movemos. Y el uso de los datos.

"La nueva regulación no va a por las pymes españolas, sino a por Facebook, Google o Amazon", tranquiliza Adsuara, consciente de que, como casi siempre, las empresas se han puesto las pilas en el último minuto. "La Agencia de protección de datos tampoco tiene capacidad para todo", destaca, como ha quedado demostrado en la sentencia de un ciudadano que presentó más de 800 denuncias. Use los filtros para borrar el spam, le dijo la justicia... y no nos sature. 

"Detrás de esto está el derecho al honor, a la intimidad, al final lo que está protegiendo es la libertad que uno haga lo que quiera. Si quiero ser promiscuo con mis datos, perfecto, pero si quiero ser casto, tengo derecho a serlo, porque si no es así se estará violando mi intimidad", apunta Adsuara.

Es cierto que solo un 23% de españoles conoce las claves de la nueva ley, pero su importancia es fácil de entender: "Cuando uno va a una fiesta no da su teléfono así como así, tiene precaución. En internet es lo mismo. El problema es que la gente se fía, pero luego reacciona cuando al dar su tarjeta en un networking se encuentra con spam en el correo. No hay problema en dar los datos si su uso es leal. Pero con Facebook y Cambridge Analitica se ha demostrado que mucha gente no lo es", advierte. Pero el día a día marca otras pautas.

La realidad es que solo un 12,3 % de las empresas en España ha finalizado su proceso de adaptación al nuevo reglamento, según el "II Estudio Empresas y Ciberseguridad", elaborado por la agencia de calificación de seguridad en telecomunicaciones Leet Security. El 71 % de las compañías encuestadas -un total de 110- se muestran muy preocupadas por la aplicación de dicha normativa. Y más aún lo estarán al saber que los ciudadanos cargan toda la responsabilidad sobre ellas. De hecho, el 24% considera que es cometido de éstas cuidar el uso de los datos y su difusión. Solo un 26% cree que es problema de cada uno.

Pero la pregunta es ¿están los españoles verdaderamente preocupados por la protección de sus datos, o es casi mayor el dolor de cabeza de autorizar? Un informe de Foresight Factory para el Instituto de Economía Digital (ICEMD) despeja algunas dudas. El 58% de los españoles coinciden en que el intercambio de datos e información personal online forma parte de la economía moderna. Solo un 22% es tajante y tiene decidido que no va a volver a dar sus datos.

El Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), que regula el tratamiento de cualquier dato personal, "no obliga a revalidar el consentimiento si ya lo tienen de forma expresa y lo pueden demostrar", explica el experto en Derecho y Estrategia Digital. Las empresas que están volviendo a pedirlo son, "sobre todo, las que trabajaban con un consentimiento supuestamente tácito o sin ningún consentimiento, es decir, "habían pillado los datos por ahí", añade. Mi consejos a los alumnos de Big Data es "lo que no quieras que hagan con tus datos no lo hagas tú". Simple.

En el marco del nuevo reglamento, la transferencia de datos personales a terceros exigirá el consentimiento expreso del afectado, a quien se le deberá informar de forma clara, concisa, transparente y fácil de entender la finalidad que busque con el uso de sus datos una empresa. El procesamiento de datos personales de menores sólo será válido si lo autorizan los padres o tutores y el derecho al olvido exigirá que se retiren en todas las réplicas de la publicación los datos que hubieran causado perjuicio al afectado.

La doctora en Derecho e investigadora Beatriz Sanjurjo ha alertado ya de los peligros que supone “el gran número de datos personales que cedemos a diario de forma gratuita cuando dejamos nuestra huella digital. Esa ingente cantidad de datos que circula por la red a un ritmo viral se ha convertido en uno de los elementos más rentables para empresas y prestadores de servicios en internet o apps. Los datos son los nuevos diamantes digitales”, ha dejado claro. Y los diamantes, se dice, hay que cuidarlos. Ahora, más que nunca. Y como dice el refrán, ni son para siempre ni se regalan a cualquiera.

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