A partir de diciembre

La OPEP recorta el doble de lo previsto la producción de crudo y calienta el IPC

La alianza acuerda una reducción del bombeo en dos millones de barriles diarios (mbd), lo que supone la mayor disminución de la oferta petrolera desde mayo de 2020.

El Brent y el West Texas vuelven a situarse por encima de los 60 dólares por barril.
La OPEP recorta el doble de lo previsto la producción de crudo y calienta el IPC. 
EP / Archivo

La alianza OPEP+, liderada por Arabia Saudí y Rusia, ha decidido este miércoles en Viena reducir su bombeo en dos millones de barriles diarios (mbd) a partir de diciembre, lo que supone el mayor recorte de la oferta petrolera desde mayo de 2020. Así lo ha anunciado a la prensa el viceministro de Petróleo de Irán, Amir Hossein Zamaninia, al término de una conferencia ministerial de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus diez naciones productoras aliadas, entre ellas Rusia, México y Kazajistán. 

El mercado descontaba al menos un millón de barriles al día de las cuotas de producción, lo que representa alrededor del 1% del mercado petrolero global, por lo que este anuncio dobla la previsión inicial con el objetivo de retomar el control de precio de este hidrocarburo. Solo en el Viejo Continente acumula una caída superior al 28% desde máximos de marzo, cuando llegó a los 130 euros. El anuncio del ajuste de la producción de la OPEP+ ha impulsado al alza la referencia en Europa, que ha escalado los precios del barril de petróleo, que en su variedad Brent, de referencia para Europa, ascendía a 93,35 dólares, un 1,69% más, su nivel más alto desde el 21 de septiembre. De su lado, el precio del crudo West Texas Intermediate (WTI), de referencia para Estados Unidos, subía un 1,41%, hasta los 87,74 dólares, en máximos desde mediados del mes pasado.

Esa decisión no está sucediendo de la nada, sino que se lleva cocinando a fuego lento. En las próximas semanas, podría salir más petróleo del mercado, lo que reduciría aún más los suministros y, como consecuencia, afectaría directamente al precio. Los ministros participantes también han acordado extender un año más su cooperación, con lo cual la citada alianza, forjada en 2016 para hacer frente a la caída de los "petroprecios", se mantendrá al menos hasta finales de 2023. El recorte de producción pactado este miércoles es el más voluminoso desde el de casi 10 mbd que el grupo puso en marcha en mayo de 2020 para compensar el desplome de la demanda energética desencadenada por la crisis del coronavirus.

No obstante, es de esperar que la reducción real sea menor que la oficial, ya que las extracciones de la mayoría de los productores del grupo llevan meses quedando muy por debajo de la cuota nacional establecida a pesar de que bombean al máximo de su capacidad técnica. Hace un mes, la alianza fijó en 43,85 millones de barriles diarios (mbd) el tope de la producción conjunta (no incluye a los miembros de la OPEP Venezuela, Irán y Libia), pero se estima que actualmente están produciendo entre 3,5 y 5 mbd por debajo de ese nivel. Aún cuando el recorte real vaya a ser al final menor que el anunciado, la medida adoptada supone un claro "no" a las naciones occidentales que vienen desde hace tiempo pidiendo a la OPEP que abra los grifos para abaratar los combustibles y la energía, y frenar así la inflación.

La decisión se produce después de que los Estados miembro de la Unión Europea hayan llegado a un acuerdo para aprobar la nueva ronda de sanciones contra Rusia, que incluirá un tope al precio del petróleo ruso, posibilidad que llevan meses estudiando. El pacto, que se ha tomado a nivel de embajadores en el marco de la octava ronda de sanciones contra Moscú, excluye los envíos a través del oleoducto, por lo que excluye a Hungría de dicha tanta de penalizaciones. La UE dice que los envíos por mar representan el 90% del petróleo que Rusia envía a Europa.

“Antes de la guerra, el país liderado por Vladímir Putin exportaba 1,5 millones de barriles diarios por barco al viejo continente, aunque desde entonces las exportaciones han caído por debajo del millón”, según RBC Capital Markets. Hasta ahora, las exportaciones totales de crudo de Rusia se han mantenido relativamente estables porque el país está enviando más petróleo a Asia. Europa está trabajando en planes que podrían afectar esos envíos a Asia, incluida la prohibición del seguro de los barcos que transportan petróleo ruso y el establecimiento de un límite al precio para el petróleo que exporta Rusia. Se espera que esos planes entren en vigor casi al mismo tiempo que la prohibición del crudo transportado por mar.

“El presidente ruso, no obstante, podría adelantarse a la acción europea, o incluso sabotear la infraestructura”, escribe Helima Croft, jefa de estrategia global de productos básicos en RBC. En una nota, Croft deja claro que sospecha que Rusia estuvo detrás de la explosión que provocó fugas en las tuberías de gas natural de Nord Stream. Croft comenta que “el riesgo de más interrupciones en el suministro de energía impulsadas por Rusia permanece en niveles DEFCON 3 en nuestra opinión” y “creemos que Putin probablemente esté preparado para retirar las exportaciones de petróleo a Europa antes del 5 de diciembre”.

Mostrar comentarios