Panrico despide a 60 empleados de la fábrica de Santa Perpètua

Barcelona, 19 sep.- Panrico ha despedido a 60 empleados de distintas líneas de producción de la fábrica de Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona), y ha dejado activos sólo dos turnos de producción de Donuts.

Según avanza hoy El País y ha confirmado el presidente del comité de empresa de la planta de Santa Perpètua, Ginés Salmerón, los trabajadores despedidos forman parte de las líneas de producción que elaboraban Bollycaos, Donettes y pan de molde.

"Casi se han alcanzado los 154 despidos previstos por el ERE", ha lamentado el presidente del comité de empresa.

Salmerón ha explicado que, tras estos últimos despidos, la planta de Santa Perpètua se ha quedado en 173 trabajadores, 73 del área industrial y 100 de administración.

El presidente del comité recuerda que, antes de la presentación del ERE y del conflicto laboral que se materializó en un huelga de ocho meses entre octubre del año pasado y junio de este año, la planta de Santa Perpètua contaba una plantilla de 351 trabajadores, 250 de ellos dedicados a la actividad industrial.

Los únicos despidos que, según Salmerón, la empresa no ha podido llevar a cabo en Santa Perpètua son los previstos para 2015 (en concreto, 34 puestos de trabajo del almacén) y que, junto a los que se tenían que realizar en 2016, formaban parte de los 156 despidos que la Audiencia Nacional declaró injustificados.

Antes del ERE la planta de Santa Perpètua tenía un turno para producir pan de molde con corteza, otro para Bollycao, 2 turnos de producción de Donuts, otros 2 de Donettes y también dos turnos de producción de pan de molde sin corteza.

Ahora Salmerón denuncia que la planta vallesana se ha quedado tan sólo con dos turnos de producción de Donuts, por lo que cuestiona que la dirección de la empresa "quiera reactivar el centro de Santa Perpètua".

En este sentido, Salmerón se ha preguntado "cómo se puede reactivar una fábrica dejando sólo 2 turnos de producción", y ha insinuado que el crédito de 8 millones de euros que el Instituto Catalán de Finanzas concedió a Panrico ha servido para aportar liquidez a la empresa y financiar así los despidos.