Tras ser adquirida por UBS

El Parlamento suizo aprueba una comisión para investigar la compra de Credit Suisse

La semana pasada, la institución ya había aprobado la celebración de una sesión para debatir esta operación, que comenzará el 11 de abril y se desarrollará hasta el día siguiente, con la opción de prolongarse una jornada más.

El Parlamento suizo abre una comisión para investigar la crisis de Credit Suisse.
El Parlamento suizo aprueba una comisión para investigar la compra de Credit Suisse
Europa Press

La Cámara baja del Parlamento Suizo ha aprobado por unanimidad la creación de una comisión de investigación para estudiar la compra de Credit Suisse por UBS, operación que se ordenó el pasado 19 de marzo por el Gobierno como medida para frenar la situación económica tan grave que está experimentando la entidad financiera adquirida. 

La comisión tendrá por objeto "establecer las responsabilidades de las autoridades y los órganos respecto a la adquisición de Credit Suisse por UBS", según ha indicado el Parlamento suizo. La semana pasada, el Parlamento ya había aprobado la celebración de una sesión extraordinaria para debatir esta operación, que comenzará el 11 de abril y se prolongará hasta el día siguiente, con opción de prolongarse una jornada más, según detalló hoy la nota parlamentaria que demuestra la necesidad de salvaguardar las precauciones hasta que el sector esté más estabilizado. 

También la semana pasada, una comisión del Consejo de los Estados (cámara alta de Suiza) pidió a algunas de las principales autoridades del país responsables del acuerdo de compra de Credit Suisse que comparezcan ante ella para ofrecer explicaciones sobre la operación que tantas preocupaciones ha desatado dentro de un panorama que deja en riesgo al sector bancario suizo.

Responderán ante la comisión senatorial de gestión la ministra de Finanzas suiza (Karin Keller-Sutter), su homóloga de Justicia (Elisabeth Baume-Schneider) y responsables de la autoridad federal de supervisión de los mercados financieros (Finma) y del Banco Nacional de Suiza (BNS).

La compra de Credit Suisse ha despertado críticas entre distintos partidos del espectro político suizo, tanto por el elevado coste que supondrá para las arcas públicas como por determinadas medidas de urgencia tomadas para forzar la operación, tales como cambiar normativas para impedir que la adquisición requiera la aprobación de los accionistas de las entidades involucradas.

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