Pequeñas gasolineras alertan de escasez de suministro tras el fin del descuento

El anuncio de que la bonificación de 20 céntimos a los carburantes llegaba a su fin el 31 de diciembre ha sido tomado con recelo por el sector, que teme no poder hacer frente al aumento de la demanda de conductores queriendo repostar sus vehículos antes de que los precios vuelvan a subir casi de forma automática. Las escenas más temidas son las largas colas vividas en las gasolineras el pasado 1 de abril, cuando entró en vigor la medida que rebajaba los precios del diésel y la gasolina, que por aquel entonces rondaban los 2 euros por litro. 

Fuentes del sector consultadas por La Información auguran un incremento "muy pronunciado" de la demanda de combustibles y muestran sus dudas sobre que la oferta existente pueda absorberla por completo. En la misma línea se muestra la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (CEEES), que apunta a que pueden producirse cuellos de botella en el suministro "en caso de que las 11.800 estaciones de servicio que hay en España pidan carburante a la vez y de un día para otro". Repsol, BP, Shell y Galp ya han anunciado que mantendrán el descuento.

Son precisamente las estaciones de servicio más pequeñas y las que operan de forma independiente las que ya están empezando a tener problemas de aprovisionamiento. Según CEEES, hay proveedores que ya han comunicado la imposibilidad de servir el carburante solicitado, debido a dificultades técnicas o porque han sufrido una "rotura de sus stocks". Estas gasolineras, denominadas 'blancas' en el argot, adquieren sus suministros al operador que ofrezca un mejor precio, y fijan el precio de venta al público libremente, en competencia directa con las grandes cadenas. 

Las grandes petroleras, preparadas para las colas

La situación es distinta entre los grandes operadores. Tanto Cepsa como BP han confirmado a este medio que ya habían previsto un aumento de clientes debido a las fechas navideñas, por lo que han reforzado sus servicios. La petrolera británica ha previsto esta mayor afluencia y aseguran disponer del volumen de stock necesario para hacer frente a las necesidades de los conductores. Cepsa, por su parte, está analizando el anuncio del Gobierno para decidir futuras acciones al respecto. 

Actualmente, existen estaciones de servicio en España divididas entre instalaciones independientes, sin contrato de exclusividad de suministro con un operador al por mayor de productos petrolíferos; instalaciones abanderadas, integradas en la red de distribución de operadores al por mayor con gestión de un distribuidor minorista, y gasolineras de operadores al por mayor.

Según los últimos datos disponibles, las primeras suponen un 40% del mercado, mientras que los otros dos grupos completan el 60% restante. Dentro de este último destaca Repsol, operador con mayor presencia en el mercado con un 25% de las instalaciones de suministro. Le siguen Cepsa, con un 12,5%, y BP, con un 6,6%. En conjunto, suman más del 40% de las estaciones.

El coste de la bonificación de 20 céntimos por litro durante sus tres primeros meses de aplicación se estimó en 1.423 millones de euros, por lo que para el conjunto de los nueve meses que ha estado en vigor ascendería a más de 4.000 millones de euros. El coste ha sido uno de los principales motivos por los que se habría decidido su eliminación, así como por su carácter regresivo, ya que se aplica a todo el mundo por igual, independientemente de su renta.

Diésel y gasolinas, en descenso

Además, desde el Ejecutivo defienden que el precio de los combustibles ha ido descendiendo en los últimos meses. El diésel se sitúa en torno a los 1,6 euros y la gasolina, alrededor de los 1,5 euros, frente a los máximos de 2,1 euros y 2,15 euros, respectivamente, que han llegado a tocar este año. No obstante, el precio del litro de gasolina es un 7,72% más caro que hace un año, mientras que en el caso del gasóleo es un 23,58% superior.

La brecha entre ambos es ahora de 10 céntimos (ha llegado a tocar los 20) mientras que el precio medio del litro de diésel en España se mantiene por decimonovena semana consecutiva por encima del de la gasolina. Este importe medio de ambos carburantes incluye los impuestos, pero no refleja el descuento del Ejecutivo ni las rebajas adicionales de las petroleras.

El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, ha llegado a advertir de que el precio del diésel continuará por encima debido a que durante el invierno este combustible aumenta sus márgenes frente a otros periodos del año, así como por la restricción a la importación del gasóleo ruso. También considera que existe la posibilidad de que algunos países usen diésel para generar energía en vez de gas natural licuado (GNL), lo que aumentará más la demanda y, con ello, el precio.