El Consejo General de Economistas (CGE) ha revisado una décima a la baja su previsión de crecimiento de la economía española para este año, hasta el 3,8% (situándola así seis décimas por debajo del cálculo que ha elaborado el Gobierno), y seis décimas la de 2023, al 0,9% (1,2 puntos por debajo de la que se recoge en el último cuadro macroeconómico) debido al efecto de la inflación y de la subida de los tipos de interés sobre la renta disponible y el ahorro de los hogares.
En su observatorio financiero publicado este lunes, los economistas apuntan que esperan un estancamiento en el último trimestre del año, al que seguirá una contracción del 0,3% en el primer trimestre de 2023 ante la caída de la demanda interna y de las exportaciones. La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ya advirtió recientemente de que la economía española podría entrar en recesión técnica entre el último trimestre de este año y el primero del que viene, si bien, el organismo fiscalizador limitaba el impacto de esta pérdida de actividad.
El observatorio revisa ligeramente a la baja su previsión de inflación media para este año -situándola en una horquilla de entre el 8% y el 8,2%, cuando en su anterior estimación era del 8,5%-, pero mantiene la de 2023 en el 4%, basada en el supuesto de que los precios de la energía y de las materias primas "cederán" en la primera mitad del próximo año.
La elevada tasa de inflación así como el incremento de los tipos de interés está afectando a la renta disponible y a la tasa de ahorro que, en el segundo trimestre, último dato publicado por el INE, ha tenido una variación negativa de 1,8 puntos, hasta situarse en el 8,5% de la renta disponible bruta trimestral, lo que hace que se contraiga la demanda interna. "Hay que tener en cuenta que, al contrario que en Estados Unidos, la demanda interna en Europa, y en concreto en España, está más debilitada y más sensible a estos efectos. A esto se une que en los próximos dos trimestres el turismo, con un gran peso en nuestra economía, será residual", apuntan.
Los economistas destacan también que todos los analistas prevén un crecimiento económico inferior al consignado en los presupuestos de 2023, aunque admiten que las políticas destinadas al comercio, el turismo, las pymes o las infraestructuras "podrían ser un revulsivo para la economía".
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