Arranca la recuperación económica y lo hace con fuerza. El Producto Interior Bruto (PIB) registró un incremento del 2,8% en el segundo trimestre del año respecto al primero y rebotó nada menos que un 19,8% en relación con el mismo periodo de 2020, cuando la economía estaba completamente paralizada por el confinamiento. La actividad se animó coincidiendo con el levantamiento de las restricciones tras el estado de alarma, el avance de la campaña de vacunación y a las puertas de la quinta ola de contagios que empezó a asomar a finales del mes de junio.
Después de haber registrado en el primer trimestre del año un retroceso del 0,4% debido al impacto de la tercera ola de la Covid y de la borrasca Filomena, la economía española creció un 2,8% entre abril y junio respecto al trimestre anterior debido, sobre todo, al impulso del consumo, según se deduce del avance de datos de Contabilidad Nacional publicado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Además, en tasa interanual, el PIB se disparó en el segundo trimestre a tasas nunca vistas, tras el parón sufrido en el mismo periodo de 2020 por el impacto del confinamiento. En concreto, la economía española rebotó un 19,8% interanual, frente a la caída del 4,2% experimentada en el trimestre anterior.
Con este rebote interanual del PIB se rompe la tendencia tras cinco trimestres consecutivos de tasas interanuales negativas iniciadas en el primer trimestre de 2020 por el efecto de la pandemia sobre la actividad económica. España encara así la recuperación en un panorama no exento de incertidumbre por el eventual impacto de la quinta ola de contagios sobre la actividad, especialmente en el sector turístico, que está viendo interrumpida la campaña de verano por las nuevas restricciones que se van imponiendo tanto en el ámbito nacional en determinadas comunidades autónomas como en países extranjeros que recomiendan no venir a España por la elevada tasa de incidencia, afectando al flujo de visitas.
En este contexto, Estadística explica en una nota que el avance de datos publicado este viernes está elaborado con la información disponible hasta el mes de mayo, así como con algunos resultados adelantados de junio, de modo que no recoge por el momento el golpe de la quinta ola. Este hecho, precisa el INE, unido a la dificultad que ha supuesto para la medición estadística un cambio de coyuntura como el de la crisis de la Covid-19, "hace prever que las futuras revisiones de los resultados hoy publicados puedan ser de una magnitud mayor que la habitual".
En cualquier caso, el buen dato de PIB llega después de una Encuesta de Población Activa (EPA) bastante optimista en lo que se refiere al incremento de la ocupación y a la caída del paro en el segundo trimestre del año. Un cóctel de indicadores que ha servido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para presumir de liderazgo en la recuperación económica respecto a los países del entorno, así como de "medalla de oro" en vacunación. El optimismo en el área económica del Ejecutivo es palpable. Y gran parte viene justificado por el buen ritmo de los 'pinchazos', según admiten desde el departamento que dirige la vicepresidenta Nadia Calviño.
En términos de PIB, los resultados del segundo trimestre coinciden con el periodo de levantamiento de las restricciones tras el estado de alarma que permitió a los negocios aprovechar el inicio de la campaña estival a nivel nacional. Como consecuencia, la demanda nacional aportó 20,3 puntos al crecimiento interanual del Producto (22,9 más que entre enero y marzo), mientras que la demanda externa experimentó una aportación negativa de 0,5 puntos (1,1 más que en a principios del ejercicio).
Por su parte, el empleo, en términos de horas trabajadas, registra una variación intertrimestral del 4,4%. Esta tasa es de menor magnitud en el caso de los puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo (del −0,2%, lo que supone 1,6 puntos menos que en el primer trimestre) debido al aumento que se observa en la jornadas a tiempo parcial (4,6%). En términos interanuales, las horas trabajadas crecen un 28,8%, tasa 32,4 puntos superior a la del primer trimestre de 2021, y los puestos equivalentes a tiempo completo lo hacen en 18,9%, 20,8 puntos más que en el primer trimestre, lo que supone un incremento de 2.825 mil puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo en un año, indica el INE.
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