Plan Ibirapitá: los jubilados uruguayos ingresan a la era digital

  • Una fría tarde de invierno en el centro del Montevideo, unos dos mil jubilados esperan ansiosos su nueva tableta en el marco de una iniciativa oficial que apunta a la inclusión digital: el Plan Ibirapitá.

El ambicioso plan del gobierno de la coalición de izquierdas Frente Amplio apuesta a extender a la tercera edad un plan de inclusión digital, iniciado con los escolares y conocido como "Ceibal", que dota a todos los escolares de la educación pública una computadora.

En esa misma órbita, el nuevo Plan Ibirapitá busca entregar una tableta a los pensionados para que puedan acceder a internet.

"Me gusta usarla para entrar en Facebook. Desde que tengo la tableta ya casi no entro a internet en la computadora de mi casa", dice a la AFP Nelly Bagnuoli, de 70 años y residente de Peñarol, un barrio obrero en el norte de Montevideo.

Muchos de sus allegados asistieron a clases de computación para aprender a utilizar la tableta y acceder al programa. Es un requisito que los jubilados asistan a una clase de unas tres horas al recibir la tableta para conocer sus funciones.

El gerente general del Plan Ceibal, Gonzalo Pérez Piaggio, aseguró a la AFP durante una jornada de entrega de tabletas del Plan Ibirapitá en la pequeña ciudad de La Paz, a unos 25 km de Montevideo, que el objetivo es alcanzar a unos 300.000 jubilados con esta iniciativa pionera.

El país tiene 3,4 millones de habitantes y lanzó en 2007 el Ceibal, durante la primera administración de Tabaré Vázquez (2005-2010), actual presidente.

Los requisitos para obtener la tableta son estrictos, explica Bagnuoli, representante de una asociación de jubilados en su barrio.

Solo pensionados que tengan un ingreso máximo de 24.416 pesos (unos 856 dólares) pueden acceder al programa luego de registrarse. Los interesados deben tener una cuenta telefónica.

El aparato tiene una pantalla de nueve pulgadas y, al igual que las computadoras para escolares y liceales, funciona en buena parte con software desarrollado localmente.

Según información de la Presidencia, las tabletas funcionan en dos "modos": el modo Android con un sistema operativo estándar, y el modo "Ibirapitá", más accesible para personas sin experiencia con la utilización de ordenadores.

"Un compañero nuestro que es español entró (a internet y vio el) pueblo donde nació y no quería salir más. Estaba muy emocionado", relató Bagnuoli.

En septiembre, el gobierno inició la etapa de distribución de estas tabletas en ciudades del interior.

Según el presidente del Plan Ceibal, bajo cuya órbita funciona el Ibirapitá, Miguel Brechner, el Ejecutivo aspira a entregar unas 100.000 tabletas en 2016.

El plan Ibirapitá toma como nombre el árbol autóctono bajo el cual el prócer uruguayo José Artigas descansaba en sus últimos años de vida en el exilio en Paraguay.

mr/lm

Mostrar comentarios