El líder de Podemos, Pablo Iglesias, aprovechó el Consejo Ciudadano Estatal (CCE), máximo órgano de dirección entre asambleas, que se convocó para responder de los malos resultados cosechados por la formación en los comicios europeos, autonómicos y locales del pasado 26 de mayo, para lanzar un órdago a Pedro Sánchez y exigirle un gobierno de coalición en el que Podemos tendría un papel importante. Al tiempo, detalló más de una decena de medidas económicas imprescindibles, que encuadró en tres ejes, para apoyar la investidura del socialista.
"Las políticas se cambian desde el Gobierno. Los acuerdos programáticos son papel mojado, no hay ningún mecanismo que permita obligar a un Gobierno a ejecutar un acuerdo programático", justificó, antes de defender "inaugurar una nueva cultura democrática en España", la de los gobiernos de coalición. Iglesias respondía así a los que se han opuesto dentro de la formación -fundamentalmente los Anticapitalistas de Podemos Andalucía- a gobernar con los socialistas.
El líder de la formación 'morada' aseguró que los cambios sociales que propugnan desde Podemos y que reclaman los españoles solo pueden producirse con un gobierno de coalición y progresista, "porque desde fuera es imposible". En su listado de demandas, Iglesias incluyó la derogación total de la reforma laboral, a la que se comprometieron los socialistas, asegurando que sino cumplen, "sería un fraude electoral puesto que lo llevaban en su programa electoral". Sánchez, en principio, solo está dispuesto a acabar con los artículos más polémicos.
También Iglesias instó a elevar el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) desde los 900 euros actuales a 1.200 euros y a elevar el permiso de paternidad y maternidad a 24 semanas. Además, exigió políticas 'verdes', para impulsar la transición energética, y 'moradas', en sintonía con el feminismo y sus reivindicaciones.
La autocrítica y los liderazgos
Iglesias, dos semanas después de los comicios del 26 de mayo, asumió que los resultados electorales de las autonómicas, municipales y europeas habían sido "malos y muy decepcionantes", pero destacó que le llamaba la atención que se hayan producido tras las elecciones generales, cuando fueron "de abajo arriba". No obstante, añadió que ahora toca evaluar cuál es el problema, "que es de todos y no solo de los candidatos territoriales".
En su intervención, Iglesias apuntó que en los comicios del 26 de mayo jugaron un papel muy importante el liderazgo en municipios y territorios, y destacó que hubo excepciones a los malos resultados en figuras como la del alcalde de Cádiz, José María González 'Kichi', o la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. Para el líder 'morado', el hecho de presentarse en cada territorio con un nombre distinto ha generado "confusión" no solo dentro de la organización sino también a la ciudadanía, y ha puesto como ejemplo que él mismo al llegar a cada territorio debía preguntar cómo se llamaban allí.
Echenique asume su culpa
El hasta ahora secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, ha justificado su cese tras no haber conseguido "los objetivos que se habían planteado desde la secretaría". Echenique cree que tras la diferencia obtenida entre los resultados de las elecciones generales y autonómicas y municipales "hay trabajo por hacer", y considera que esta va a ser una de las principales tareas de la nueva Secretaría de Organización con Alberto Rodríguez al frente.
Así lo ha señalado en un encuentro con los medios de comunicación durante la celebración del Consejo Ciudadano Estatal del partido, donde, no obstante, ha asegurado que sí que se han hecho algunas cosas bien, como mejorar los sistemas de votación del partido. Sobre su sucesor al frente de la Secretaría de Organización, Echenique ha señalado que es una persona "no solo con unas capacidades muy altas para hacer un trabajo político y muy comprometida con las luchas sociales, sino que además es buena persona".
Nueva ejecutiva de Podemos
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha obtenido el apoyo del partido para acometer una reforma amplia de su ejecutiva, en la que entran el canario Alberto Rodríguez como secretario de Organización, la diputada Ione Belarra y el líder de Podemos en Castilla y León, Pablo Fernández Santos. También se incorporan al órgano de dirección la exdiputada Ana Marcello y el secretario general del grupo parlamentario de Unidas Podemos, Txema Guijarro, mientras que salen el líder de Más Madrid Íñigo Errejón y la errejonista Auxiliadora Honorato, además de Pablo Bustinduy, que dejó el partido.
Los cambios propuestos por Pablo Iglesias han sido aprobados por el Consejo Ciudadano Estatal con 42 votos a favor, ninguno en contra y 6 abstenciones, en una reunión en la que ningún asistente ha cuestionado su liderazgo tras los resultados electorales. La número dos del partido, Irene Montero, seguirá siendo la portavoz parlamentaria mientras que Noelia Vera será la portavoz en solitario de la formación, cargo que antes compartía con Pablo Echenique, pero deja la Secretaría de Participación, que pasa a Ana Marcello, la cual también asumirá la de Círculos. En total se han renovado dos de cada tres cargos en la Ejecutiva.
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