Dirigida a emprendedoras

El primer banco dirigido por mujeres y para mujeres desafía la crisis en EEUU

El FWBank nace en Chicago con un enfoque estratégico centrado en cerrar la brecha de género en el acceso de las empresarias al capital. Es la primera entidad que nace en la ciudad desde Lehman Brothers.

Imagen de la manifestación en favor de la mujer celebrada en Chicago en enero de este año.
Imagen de la manifestación en favor de la mujer celebrada en Chicago en enero de este año.
EP

Las mujeres representan una parte cada vez más poderosa del tejido empresarial de los Estados Unidos. Pero esa realidad no se refleja en la experiencia que tienen al acceder al capital que necesitan para crear y hacer funcionar sus negocios. "La brecha de género en los préstamos a las pymes es real y persistente", como advierte Marianne Markowitz. Así que para empezar a cerrarla, decidió crear junto a otras conocidas ejecutivas en Chicago el primer banco del país con un enfoque estratégico centrado en la economía de la mujer.

El First Women´s Bank es la única firma bancaria creada y dirigida por mujeres para dar asistencia financiera a emprendedoras. "Ya iba siendo hora", comentó Markowitz tras recibir la luz verde de la agencia que regula la actividad de las pequeñas entidades para poder empezar a operar. Es también el primer banco de nueva creación en la gran metrópoli de Illinois desde la crisis financiera. El último lo hizo antes del derrumbe de Lehman Brothers por las hipotecas basura. 

Markowitz no emerge de la nada. Dirigió las finanzas de la campaña que llevó al demócrata Barack Obama a la Casa Blanca y estuvo al frente de la agencia federal que asiste a las pymes. Tiene, por tanto, las conexiones y entiende las necesidades de un segmento vital para la marcha de la economía. El FWBank, explica la consejera delegada, ofrecerá cuando empiece a operar "una estrategia única y una misión diferenciada" respecto a otras entidades comerciales. 

"Es un buen momento para hacerlo", comenta Abigail Scanlan desde el Centro de Desarrollo de Negocio para Mujeres en la Windy City. Lisa Kornick, una de las fundadoras del banco, tiene experiencia en el negocio de la restauración y sabe que una institución que responda a las necesidades de capital de las empresas creadas por mujeres "es una fórmula ganadora", que generará importantes retornos para la economía. Por eso augura que su modelo se expandirá rápido. 

Aunque la idea de un banco para mujeres puede parecer evidente como oportunidad de negocio, surgió de una discusión de Lisa con otras de las fundadoras del FWBank sobre cómo las mujeres empresarias siguen yendo muy por detrás de los hombres cuando se trata de acceder a financiación. Los datos oficiales muestran la enorme brecha de género. Si bien más de cuatro de cada diez empresas son propiedad de mujeres, solo recibieron el 16% de los préstamos a las pymes. En el caso del capital riesgo es aún mayor, al representar tan solo el 5% de los acuerdos. 

"Es chocante", insiste la copropietaria de la cadena DMK Restaurants. Actualmente hay cerca de 13 millones de pequeñas empresas con propiedad de mujeres como la suya. Markowitz insiste por su parte en que corresponde a los propios bancos la solución. El plan de esta entidad comercial es empezar así reduciendo las barreras a las que se enfrentan las fundadoras de pymes al acceder al capital.

Eso explica, por ejemplo, que una mujer tenga que dar vida a su empresa con la mitad del dinero que un hombre. Y las restricciones institucionales al acceso de capital provocan, a su vez, que la mayoría de las empresas propiedad de mujeres se financian con ahorros o con el capital que les facilitan familiares o amigos. En el caso más extremo, se hace a base de acumular deuda a través de las tarjetas de crédito. 

El reto es aún mayor para las mujeres de color. La oportunidad de mercado es enorme para una entidad de este tipo. La falta de acceso a la liquidez, de hecho, no está impidiendo que la creación de empresas fundadas por mujeres crezca cuatro veces más rápido que las creadas por hombres. Scanlan comenta en este sentido que este primer banco que abrirá sus puertas en el barrio de Goose Island puede representar un incentivo "para que las mujeres emprendedoras se unan, generen apoyo y puedan crear una comunidad". 

El FWBank ofrecerá así servicios bancarios tradicionales y una plataforma para conectar a clientes e inversores con las pequeñas empresas aportando soluciones de capital que fomenten la inclusión. "Será un banco comercial innovador", explican desde la entidad, "que apoyará a la economía de las pequeñas empresas al promover el papel de las mujeres y reducir la brecha de género en el acceso al capital". 

El grupo que lidera Marianne Markowitz incluye a Amy Fahey, una de las tres fundadoras que participó en aquella discusión inicial con Lisa Kornick. Esta ejecutiva trabajó durante tres décadas para JP Morgan Chase y ejerce de preside la junta del FWBank. En el equipo directivo también hay hombres. Tod Gordon es el director financiero. Steven Bangert está especializado en la restructuración de compañías y Gary Paskvan tiene experiencia en la gestión de riesgos en la banca comercial. "Realmente queremos construir un entorno comunitario", reitera la consejera delegada. 

Aunque el banco tiene su sede en Chicago, el plan es prestar servicios a pequeñas empresas a escala nacional al tiempo que ofrecerá asesoramiento en cuestiones que van más allá del acceso a crédito como la contratación. Para lanzar el FWBank, los reguladores le impusieron como condición recaudar 50 millones de dólares en capital inicial. Antes de la crisis bastaba con 15 millones. La pandemia por el coronavirus retrasó el proceso de captación de fondos tres meses. Pese a este traspié, esperan que la ronda de capital esté completada para el 30 de septiembre y por empezar a operar a comienzos de 2021 cuando reciba el aprobado definitivo de la Reserva Federal. El primer objetivo serán las propietarias de pequeños negocios como peluquerías, guarderías, clínicas, firmas consultoría, tiendas y empresas de mantenimiento del hogar. Y a partir de ahí, crecer.

Mostrar comentarios