Madrid, 26 jul.- La compañía de seguridad Prosegur logró un beneficio neto de 62 millones de euros en el primer semestre de 2013, un 11,8 % menos que en el mismo semestre del año anterior, debido fundamentalmente al incremento de los costes laborales y las depreciaciones de divisas.
Según comunicó hoy la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), los ingresos del periodo aumentaron un 5 %, hasta los 1.840 millones de euros, mientras que el ebitda creció un 0,7 %, hasta los 188 millones.
La empresa explica que en los resultados han influido dos factores: los mayores costes laborales en Brasil y el impacto de los tipos de cambio.
Por negocios, las ventas en vigilancia, que suponen un 46,2 % del total, crecieron un 5,4 % hasta los 851 millones gracias al buen comportamiento en Latinoamérica.
Los ingresos en área de logística de valores y gestión de efectivo (LVGE), que representa un 42,5 % del total, crecieron un 4 %, hasta los 782 millones; mientras que los del área de tecnología aumentaron un 6,5 %, hasta los 208 millones.
Por regiones, las ventas de Europa y Asia cayeron un 1 %, hasta los 725 millones; mientras que en Latinoamérica subieron un 9,2 %, hasta los 1.115 millones.
En España, la facturación registró una caída del 5,5 %, hasta los 447 millones de euros.
La empresa destaca que ha mejorado sus márgenes en Europa y sus ventas han crecido por encima de los promedios de incremento económico en Latinoamérica.
"La tendencia es positiva para el resto del año", destacan en su presentación.
Al cierre del semestre, la deuda total de Prosegur se sitúo en 623 millones, lo que supone 51 millones menos que al cierre de 2012.
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