SMI, pensiones, reforma laboral... el BdE activa las alertas ante el pacto PSOE-UP

bde
bde

El Banco de España le ha leído la cartilla al Gobierno de coalición entre el PSOE y Unidas Podemos antes incluso de que eche a andar. El supervisor ha aprovechado varios de sus últimos informes para analizar el impacto de algunas de las medidas que pretenden poner en marcha Pedro Sánchez y Pablo Iglesias a lo largo de la próxima legislatura. Y el resultado es una advertencia tras otra sobre el peligro para la economía de llevar a cabo iniciativas como otra fuerte subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), la indexación de las pensiones a la inflación o la derogación de la reforma laboral vigente.

El organismo constata una peor evolución del empleo en las regiones y sectores con una mayor prevalencia del SMI. También avisa de que 2019 ha sido un año perdido para la reducción del déficit debido al incremento del gasto que han supuesto ciertas medidas aprobadas por el Gobierno y ha elevado sensiblemente el desfase previsto para los próximos años tras asumir que las pensiones se ligarán sí o sí al Índice de Precios de Consumo (IPC). Asimismo ha defendido la reforma laboral de Mariano Rajoy al asegurar que permite crear empleo con crecimientos de la economía inferiores al 1%. Y todo ello en una misma semana.

El lunes el director general de Economía y Estadística del Banco, Óscar Arce, admitió que no hay datos "irrefutables" sobre el impacto del SMI y que la ralentización más aguda del mercado laboral en algunas comunidades autónomas podría obedecer a otros factores. No obstante, vio fundamental que se realice una evaluación exhaustiva de cara al nuevo incremento previsto en el programa diseñado por el PSOE y Podemos, que finalmente no alcanzará el 11% y, por tanto, no se llegará a los 1.000 euros, tal y como confirman a La Información fuentes conocedoras de las negociaciones entre ambos partidos.

No hay que olvidar que a principios de este año el BdE había advertido de que la subida del SMI a 900 euros pactada entre Sánchez e Iglesias –por cierto, al margen de los agentes sociales– podría llegar a destruir hasta 125.000 empleos, si bien recientemente ha informado de que se está elaborando un informe en detalle que se dará a conocer a mediados de 2020, una vez se disponga de todos los datos de cierre de este año. Como adelantó este diario, este ejercicio se realizará en colaboración con la Autoridad Fiscal y el Ministerio de Trabajo, desde donde se ha llegado a reconocer que el salario mínimo ha provocado más economía sumergida.

El mismo lunes el supervisor publicó sus previsiones macroeconómicas para el cuatrienio 2019-2022, que no trajeron grandes novedades respecto a la senda de desaceleración económica que viene, pero sí una importante revisión al alza del déficit público. El motivo no es otro que la asunción de que las pensiones se revalorizarán con el IPC durante todo el periodo de proyección, tal y como figura en los planes del Gobierno de coalición progresista, que va a colocar a los pensionistas como uno de los colectivos prioritarios durante la próxima legislatura. 

A esto se añade que el viernes, en su informe trimestral de la economía española, constató que el déficit público se ha mantenido en 2019 en el mismo nivel del año anterior. Esto se debe a las medidas aprobadas por el Gobierno socialista, algunas pactadas con Unidas Podemos en los Presupuestos de 2019, que fracasaron, pero se activaron por la vía del decreto. "Este empeoramiento vendría explicado, principalmente, por un mayor gasto derivado de la revalorización de las pensiones y la subida de los salarios de los empleados públicos aprobada a finales de 2018, así como por el incremento del gasto en desempleo como consecuencia de la ampliación del subsidio a los mayores de 52 años", explica el Banco.

Espaldarazo a la reforma laboral

Antes, el miércoles 18, el Banco de España había adelantado el recuadro 'Relación entre el crecimiento del PIB y el del empleo en la economía española', que dejó varias conclusiones. La más relevante, que "el umbral de crecimiento del PIB a partir del cual se crea empleo se habría reducido ligeramente en el período más reciente, hasta situarse algo por debajo del 1%". Esto significa que la reforma laboral diseñada por Rajoy y su entonces ministra de Empleo, Fátima Báñez, permite generar puestos de trabajo con menores niveles de crecimiento de la economía.

Y no solo eso. El organismo que pilota Pablo Hernández de Cos sostiene que la legislación vigente también ayuda a que se destruyan menos puestos de trabajo ante eventuales crisis. "La legislación laboral aprobada a principios de esta década desarrolló mecanismos tendentes a favorecer que el ajuste en el mercado de trabajo en la fase baja del ciclo recaiga en mayor medida que hasta ahora sobre variables distintas del propio empleo, lo que debería contribuir a atenuar las pérdidas de puestos de trabajo en el momento en que eventualmente la economía pudiera entrar en un período recesivo", desarrolla.

De este modo, el Banco de España da un nuevo espaldarazo a la reforma laboral del PP en un momento en el que se ve amenazada por la eventual coalición progresista. Tal y como se reveló en estas páginas, Sánchez e Iglesias han mantenido un tenso pulso sobre la derogación de la norma. El PSOE sostiene que deben modificarse solo los aspectos que consideran "más lesivos", mientras Podemos apuesta por la liquidación total de la actual legislación para volver al marco anterior. Fuentes de las negociaciones aseguran que Iglesias habría ganado el pulso y que, por tanto, la reforma laboral tiene los días contados.

Mostrar comentarios