Habrá un fondo público "para introducir competencia"

Doble o nada... la apuesta por los planes de empleo que 'salvarán' las pensiones

Hay dos millones de partícipes, pero el objetivo son 16 millones en 2050. La nueva fiscalidad penaliza a los individuales y el ahorro. La AGE tiene 505.000 beneficiarios y Telefónica, 1,9 millones de euros en su PPE.

José Luis Escrivá
Escrivá quiere que los PPE sean un instrumento básico de ahorro para las pensiones.
Europa Press

El Gobierno pretende dar un giro de 180 grados a los actuales sistemas de ahorro de cara a la jubilación, sustituyendo de forma paulatina la opción mayoritaria actual que son los planes individuales de pensiones, a los que considera regresivos y que solo benefician a las rentas más altas, por los Planes de Pensiones de Empleo (PPE), aprobados en 1987, aunque tienen escaso éxito en España, ya que permanecen estancados desde hace años tanto en número de participes -menos de dos millones- como en fondos gestionados -en torno a 35.000 millones de euros-.

Para llevar a cabo esta 'ambiciosa' iniciativa, que se materializará en un nuevo marco jurídico y que se pondrá en marcha en el primer semestre del próximo año, el Gobierno utilizará el cebo de los incentivos fiscales, que se irán desplazando de los individuales a los de empleo; se apoyará en la negociación colectiva -las empresas y las administraciones deberán contribuir económicamente- y se crearán fondos de pensiones de empleo de promoción pública "para introducir competencia en el sector y mejorar la eficiencia de costes".

Desde el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ya han comunicado a Bruselas su intención de extender los PPE a la mayoría de los trabajadores en 2050 -16 millones de los 19,8 millones ocupados actuales- y que los activos, en términos de Producto Interior Bruto (PIB), pasen del 3% actual al 31%. Pese a que el objetivo está marcado a 20 años vista, no parece fácil que un instrumento de ahorro muy generalizado en Europa, llegue a un tejido empresarial como el español que protagonizan las pymes, que desconocen mayoritariamente como funcionan.

El Observatorio de Pensiones de Caser destacaba recientemente que una de cada tres empresas con menos de 50 trabajadores no había oído hablar nunca de los PPE y solo el 7% estaba al corriente de los cambios normativos introducidos este año sobre estos. Mientras, la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco), que recopila los datos sobre todos los diferentes planes, considera que el castigo a los individuales -en los que confían siete millones de partícipes- tendrá consecuencias negativas en el ahorro.

Los empleados públicos, en torno a 2,6 millones -incluidos los funcionarios de carrera, los interinos y los laborales- previsiblemente serán los primeros beneficiarios de estos planes, que se ya están bastante implantados en diferentes administraciones, aunque de forma muy heterogénea, una situación que cambiará con una regulación de mínimos. Al éxito de este instrumento de ahorro, que en principio irá dirigido preferentemente a los jóvenes y autónomos, también contribuirá la simplificación de los trámites para darlos de altas y la limitación de los costes de gestión de estos planes.

De Disney y Loewe a Pinto

Pese a que su implantación es escasa, las grandes empresas, las entidades financieras y las administraciones públicas han apostado claramente por los PPE como incentivo salarial para sus empleados. Según los datos recogidos por Inverco, más de 1.200 compañías e instituciones tenían suscrito un plan de empleo en marzo de este año y tres administraciones -la General del Estado, la Generalitat de Catalunya y la Valenciana- tenían el mayor número de partícipes, 505.800, 198.50 y 119.360, respectivamente. Mientras, el PPE de Telefónica, que gestiona Fonditel, la empresa perteneciente al grupo que ofrece soluciones de inversión, tenía en el tercer mes del año 2.900 millones y  23.000 partícipes.

BBVA gestiona uno de cada cuatro planes de empleo y tiene un patrimonio bajo su gestión que ronda los 8.000 millones de euros. Entre los 'clientes' Administración General del Estado, Altadis, Chanel, Disney, Enagás, Goldman Sachs, Iberdrola, Johnson and Johnson, Pfizer, Repsol y RTVE. Pero también pequeñas administraciones y empresas con todo tipo de actividad se han decantado por este instrumentos, desde Loewe o Louis Vuitton, hasta ayuntamientos como el de Onda, Pinto, Fo o Logroño o la Corporación Radio e Televisión de Galicia y las Corts Valencianes. 

Cómo funcionan los PPE

Los Planes de Pensiones de Empleo son promovidos por empresas, administraciones e instituciones -sindicatos u organizaciones empresariales- para los trabajadores como instrumento de previsión a largo plazo de cara a la jubilación. Los promotores, que son los ingresan las contribuciones, que pueden ir acompañadas por las de sus empleados, pueden ser más de uno, lo que facilita la adhesión de empresas con pocos trabajadores o con aportaciones pequeñas y los hace menos costosos.

De momento, los planes de empleo son compatibles con los individuales, con un límite máximo de 8.000 euros -6.000 los primeros y 2.000 los segundos-. Hay tres modalidades de PPE, de aportación definida, de prestación definida y el mixto, que contempla las dos. Las decisiones sobre este instrumento de inversión las toma una comisión de control, en la que están los representantes de la empresa, de los trabajadores y de los beneficiarios. El Gobierno pretende que los planes se mantengan aunque el trabajador cambie de empresa, algo que en la actualidad no pasa siempre.

Mostrar comentarios