¿Quién paga los 3.600 millones que Montoro niega al agujero eléctrico? Tú

Subió un 3% en enero, se redujo un 6,62% en marzo y volvió a la senda alcista en julio, agosto y octubre con nuevas vueltas de tuerca del 1,2%, el 3,2% y el 3,1%, respectivamente. El resultado es que el recibo de la luz en España es el tercero más caro de Europa solo por detrás de los de Chipre e Irlanda, con la particularidad de que ambos países sufren en sus carnes el impacto de los sobrecostes que su insularidad implica. Pero lo peor del caso es que la distancia con los recibos más abusivos del Viejo Continente se va estrechar con toda seguridad el año que viene.

La decisión del Gobierno de guardar en la caja los 3.600 millones que se comprometió a aportar para tapar el agujero del déficit de tarifa -la diferencia entre lo que cuesta producir la energía eléctrica y lo que paga el comsumidor por la misma- condena a los españoles a asumir una parte significativa de este incumplimiento. Si ya antes del golpe sobre la mesa de Cristóbal Montoro la mayoría de los expertos tenían claro que el precio del recibo iba a seguir subiendo, ahora no hay duda de que las familias tendrán que realizar nuevos sacrificios en 2014.

Dicho de otra forma, la parte del déficit de tarifa que el Gobierno no asume para cumplir sus compromisos de déficit se traslada ahora al sector eléctrico y por extensión a los consumidores. "El impacto en los consumidores ya está siendo muy alto, y ahora el nuevo déficit repercutirá de forma adicional, ya que su pago a plazos va a ir en el recibo eléctrico. Va a ir en detrimento del recibo de la luz, sin duda". Palabra de Eduardo Montes, presidente de Unesa, el lobby eléctrico que agrupa a los gigantes del sector Endesa, Iberdrola, Gas Natural Fenosa, E.On España y EDP.

El ministro de Industria José Manuel Soria ha salido al paso de la ofensiva de la patronal asegurando que el precio de la luz dependerá "de lo que diga el mercado", en referencia a las subastas trimestrales que realizan las compañías. Un pobre consuelo si se tiene en cuenta que desde enero de 2012 el recibo ha subido un 11%.

Los pesos pesados del sector energético español están de uñas con la decisión del Gobierno y no están dispuestos a tirar en solitario de la pesada carga de los 3.600 millones de euros que incorporan a sus balances, que están provocando una revisión masiva a la baja de las expectativas del sector por parte de los analistas bursátiles. Las cotizaciones de las grandes eléctricas cayeron este lunes.

"No es serio lo que hace el Gobierno. Traslada un problema en el déficit público al déficit de tarifa, incumpliendo con los compromisos adquiridos hace apenas cuatro meses e introduciendo un elemento de enorme incertidumbre en el sistema", señalan en el sector. La cuestión es que con las reglas del juego rotas, los consumidores se enfrentran a un escenario tan incierto como el propio sector eléctrico. ¿Cuánto más puede subir la luz?

La visibilidad es mínima. Para empezar, el año terminará con un déficit de tarifa de 30.600 millones de euros, más de un 13% por encima respecto al cierre de 2012. Y para 2014, la incógnita no puede ser mayor. Los analistas ya eran muy escépticos sobre las posibilidades de atajar el problema tras la aprobación de la reforma en julio. Algunos como los de Citi auguraban entonces una subida del 7% del precio de la luz el año que viene porque la reducción de costes prevista por el Gobierno para el año que viene no se cumplirá.

Los continuos incumplimientos de las expectativas obligan a los españoles a mentalizarse de que tendrá nque rascarse más y más el bolsillo en los próximos meses. De poco servirá hacer un gran ejercicio de austeridad y reducir el gasto de luz. ¿Por qué? El Gobierno ya se ha ocupado en la reforma eléctrica de subir la cuota fija del recibo -que no depende el consumo- para garantizar los ingresos en pleno desplome del consumo de las familias.

Las eléctricas calculan que de los 615 euros que una familia española media paga al año de recibo de la luz, más de 300 se deben a errores políticos de los Gobiernos de turno. Una cifra que muy pronto será superada con claridad.