Un negocio de 12.000 millones

Radiografía del fumador en España: así sobrevivió el mercado de tabaco al Covid

El país está en niveles mínimos de fumadores desde que hay registros, pero en 2022 se vendieron cien millones de cajetillas más que el año anterior, impulsadas por la recuperación del turismo internacional. 

Fumadora
Radiografía del fumador en España: así sobrevivió el mercado de tabaco al Covid
Alexander Grey / Unsplash

La industria tabaquera tampoco echa el freno pese a que el número de fumadores habituales en España esté en registros mínimos. Y no lo hace pese a que la inflación también ha afectado a toda la cadena de valor del tabaco, donde el alza de los combustibles, la electricidad y los fertilizantes, sumados a los mayores costes laborales, han tenido un serio impacto en las posteriores fases de producción, curado, transformación y procesado hasta llevar el tabaco a los clientes finales. 

Todo esto, lógicamente, ha impactado en las ventas, que han mejorado sus registros gracias a la recuperación del turismo, la reapertura completa del ocio nocturno y la llegada masiva de visitantes a las geografías con mayor consumo en verano. Las ventas de cigarrillos en España ascendieron a 10.076 millones de euros, creciendo un 5,6% respecto a su año previo. Los precios se mantuvieron bastante estables durante todo el año salvo en diciembre, un arreón que elevó el coste medio de la caja de cigarrillos hasta los 4,79 euros. El tabaco de liar cerró el año en 3,73 euros, mientras que el de pipa rondó los 3,25 euros, continuando con su subida progresiva de los dos últimos años. 

Por provincias, la mayor parte del negocio está en Madrid (1.212 millones), Barcelona (1.082 millones) y Girona (562 millones), dada la mayor presencia de establecimientos comerciales en las zonas fronterizas con Francia. Pero los mayores crecimientos de un año a otro los registraron Baleares, con un 19,3% más de ventas; Girona, con un 18%, y Lleida, con un 16,8%. Por encima de los dos dígitos también se sitúan Guipúzcoa, Alicante y Málaga.

Consumo nacional de cajetillas de tabaco 

Segregando datos, el consumo nacional y habitual de cajetillas subió un 1,9%, mientras que las ventas realizadas por motivos turísticos o trasfronterizos lo hicieron un 22,5%. Por marcas, Marlboro volvió a ser la más vendida, aunque pierde cuota de mercado respecto al año anterior, con un 13,6% de las ventas. Le sigue Camel, que crece medio punto hasta el 11,7%; y por debajo se sitúan Lucky Strike (7,4%), Fortuna (7,38%) y Winston Classic (7,23%). Por fabricantes, el mercado está monopolizado por Philip Morris, que retrocede punto y medio hasta el 28,7% de la cuota total, Altadis/Imperial Tobacco (27,8%) y JTI, con el 26,9% de las ventas. 

Aunque en mucha menor escala, también crecieron las ventas de cigarros un 7% hasta generar un valor de 484 millones, mientras el tabaco de liar sube al mismo ritmo, dejando hasta 1.162 millones. Pero si hay un tabaco que crece especialmente es el de pipa, cuyas ventas se dispararon un 20% hasta los 298 millones, casi 50 más que en 2021. En total, el Estado recaudó 7.075 millones de euros por aplicación del impuesto especial de fabricación, 359 más que el año anterior, a los que hay que sumar otros 1.709 millones en concepto de IVA, que también crece un 5,6%. 

Dos tercios de la producción española se ubica en Canarias, que vio como crecían sus cifras hasta alcanzar los 3.000 millones de cigarrillos elaborados durante el año pasado. En la península no hay producción de este producto, pero sí de cigarros, donde de nuevo las cifras van a favor de la economía insular: 926 millones elaborados frente a los 856 que sacaron las fábricas peninsulares, casi monopolizados por la producción de Altadis en Santander. 

Pero si hay un lugar donde se ubica el groso de la actividad económica del tabaco, ese es la distribución, casi monopolizada por Logista, que este año ha logrado mejorar sustancialmente sus ingresos. La cotizada vendió el 98% de las cajetillas que circulan por España, hasta un total de 2.144 millones, un 3,9% más que el año anterior (2.064 millones). También copa la distribución del tabaco de liar, con casi 6,5 millones de kilos movidos por España, cifra un 4,4% superior a la del año previo. 

Mayor exportación de tabaco 

Pese a que el año pasado España exportó más tabaco -el equivalente a 10 millones de euros más, hasta 243 millones- su saldo neto sigue siendo muy negativo, al importar buena parte de la producción por casi 1.450 millones de euros. Destaca, sobre todo, Polonia, desde donde han crecido un 53% los envíos de un año a otro, hasta alcanzar un valor de 547 millones de euros. Portugal es el primer país al que exporta la industria tabaquera española, por valor de 32 millones, además de 82 millones a territorios "no definidos" específicamente. 

Aunque la producción tabaquera intenta sumarse a la ola de sostenibilidad, los cálculos del Ministerio de Hacienda calcularon que la huella hídrica de la cosecha de 2022, que recoge los datos de la cantidad de agua aportada por riego para producir cada kilo de tabaco, fue la mayor de los últimos años: 1.298 litros, frente a los 1.231 del año anterior, por la sequía que asoló parte de España. En términos de contaminación, la producción del año pasado es la menos contaminante de los últimos cuatro, con una huella de carbono de 1,456 kg equivalentes de CO2 por cada kilo de tabaco curado. 

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