Repsol desea que el conflicto con argentina por ypf se “solucione fuera de un tribunal”

El vicesecretario general de Repsol y máximo directivo que está gestionando el caso de Repsol con Argentina, Miguel Klingenberg, afirmó este miércoles que “ojalá” el conflicto que mantiene la petrolera española con Argentina por la expropiación de YPF “se solucione fuera de un tribunal”.
Klingenberg insistió en que la posición de la compañía que preside Antonio Brufau es de estar “permanentemente abiertos a la negociación” porque el “deseo” de la petrolera española es alcanzar un acuerdo con Argentina.
Aunque no confirmó que se mantengan contactos con las autoridades argentinas, dejó entrever que se producen acercamientos ya que apuntó que toda negociación requiere de dos partes.
Respecto al principal litigio tienen abierto ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (Ciadi), dónde Repsol reclama a Argentina una compensación de alrededor de 10.500 millones de dólares (unos 8.500 millones en euros), desde la compañía consideran que va bastante avanzado respecto a los tiempos que emplea este tribunal internacional. Están actuando con “mucha diligencia, pero Argentina tiene una extraordinaria capacidad de defenderse”, agregó el directivo.
Al arbitraje internacional se decidió acudir ante la negativa del Gobierno argentino de llegar a un acuerdo con Repsol y abonar por esa expropiación un precio que la compañía española considere justo. Klingenberg reiteró que seguirán con los litigios judiciales hasta que por la “confiscación” reciban una “compensación adecuada”
Aunque el directivo de Repsol reconoció que la Comisión Europea “hace lo que puede” en este asunto, subrayó que desde la este organismo europeo apoyan la causa de la petrolera española “de forma contundente y extraordinaria”.
En este sentido, durante su participación en el seminario “Un año después de la expropiación de YPF por Argentina” que se celebró en el Parlamento Europeo, Klingenberg reclamó a las instituciones que “no les olviden” y que “mantengan este asunto a largo plazo en la lista de prioridades”. “No nos pongáis al final de la lista”, agregó.
Precisamente, el jefe de la unidad para Latinoamérica de la dirección de Comercio de la Comisión Europea, Matthias Jorgensen, afirmó que el caso de la expropiación de YPF es una “piedra en el zapato” en las relaciones de la UE con la región, pero que prima el interés general para el resto de acuerdos comerciales.
Jorgensen insistió en que la Comisión mantendrá el apoyo a la petrolera española y llevará este caso a todas las instituciones internacionales así como ante la OCDE, donde anunció que trabajan en un informe “confidencial” sobre el caso.
Desde la Comisión trasmiten que no se trata de un asunto que atañe a una compañía española y a Argentina, sino que es un problema de Europea en el que se debe buscar soluciones para garantizar las inversiones.
Por su parte, desde el ‘think thank’ europeo Ecipe, Fredrik Ericsson, indicó que en los últimos años las inversiones tienen un riesgo “cada vez mayor” por los cambios en las reglas del juego, derivadas del desarrollo de países emergente que han ganado poder y por la globalización. Ericsson señaló que eso es lo que ocurrió en el caso de Repsol, y que refleja que Argentina tiene “cada vez más conflictos” con otros gobiernos en el mundo por su forma de actuar.
El profesor de la escuela de negocios IESE, Pablo Fernández, presentó su informe en el que consulta con expertos españoles, argentinos e internacionales sobre la tasación de esta operación. En su estudio, Fernández asegura que la mayoría de las 1.959 respuestas de profesores de economía, analistas y directivos de 42 países, indican que el valor de ese 51% de YPF oscila entre los 9.500 millones y 11.500 millones de dólares.