Cuando una persona pierde su empleo tiene la posibilidad de acceder a diferentes prestaciones del Servicio Público de Empleo Estatal. La principal es la prestación contributiva, más conocida como 'paro', que requiere, entre otros, el requisito indispensable de un periodo de cotización mínimo siempre dentro de los seis años anteriores a la situación legal de desempleo. Es decir: si se ha cotizado al menos 360 días, los beneficiarios tienen hasta 120 días de prestación.
También hay que tener en cuenta que el periodo máximo durante el que se recibe esta ayuda es de dos años o 720 días. Esto hace que aquellos desempleados de larga duración agoten esta prestación y busquen otras alternativas con las que poder tener ingresos mensuales hasta encontrar un nuevo empleo.
La Renta Activa de Inserción (RAI) es una ayuda del SEPE para personas en situación de desempleo por diferentes razones y que no tienen acceso a la prestación contributiva o el subsidio por desempleo.
Requisitos para solicitarlo
Para solicitar esta prestación adicional podrá realizarlo por la sede electrónica, en oficinas pidiendo cita previa en el SEPE o por correo administrativo.
Para desempleados de larga duración o personas con discapacidad se exigirá la presentación del certificado de búsqueda activa de empleo (BAE), con motivo de la crisis sanitaria se flexibilizaron dichos requisitos. ¿Qué condiciones debe cumplir el interesado?
- Debe estar desempleado e inscrito como demandante de empleo.
- Suscribir el compromiso de actividad.
- Ser menor de 65 años.
- No tener ingresos mensuales superiores al 75% del salario mínimo interprofesional (SMI), es decir, 950 euros.
- En caso de tener cónyuge y/o hijos menores de 26 años, menores en acogida o mayores de edad con alguna discapacidad, la condición de los ingresos se limitará a que la suma de las rentas en la unidad familiar no supere el 75% del SMI.
- Además, no podrá haber recibido esta prestación (RAI) en el año anterior a la fecha de solicitud.
Condiciones para casos extraordinarios
Existen casos especiales que también pueden acceder a al RAI pero tiene una flexibilidad mayor. Por ejemplo, las personas desempleadas de larga duración podrán acceder a esta prestación si cumplen los siguientes requisitos:
- Tener más de 45 años
- No tener acceso a otras prestaciones contributivas, subsidio por desempleo o renta agraria
- Estar inscrito ininterrumpidamente durante más de 12 meses como demandante de empleo
- Acreditar tres acciones de búsqueda activa de empleo (BAE).
Las personas con alguna discapacidad también tendrán que presentar tres acciones de búsqueda activa de empleo (BAE), además de cumplir una serie de condiciones para acceder al RAI:
- Tener un grado de discapacidad igual o superior al 33%.
- No disponer de una prestación contributiva u otro subsidio por desempleo ni renta agraria.
- Estar inscrito como demandante de empleo durante un mínimo de 12 meses.
También se contemplarán otros casos especiales para la solicitud de esta prestación como son víctimas de violencia de género o doméstica, que deberán tener una acreditación de esta condición. A excepción de quienes convivan con las personas agresoras, que solo requerirán estar inscritas como demandantes de empleo.
Por otro lado, también podrán acceder a la subvención las personas emigrantes retornadas. Cuyos requisitos son iguales a los principales exigidos aunque tendrán que ser mayores de 45 años y menores de 65.
Duración y dinero percibido
La renta activa de inserción (RAI) se concede durante un máximo de 11 meses y se empezará a cobrar desde el día siguiente de la solicitud. La cuantía corresponde al 80% del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM), es decir, 451 euros al mes.
Además, existe la posibilidad de pedir ayudas complementarias. Por ejemplo, las víctimas de violencia de género podrán solicitar tres mensualidades de la RAI en un pago único. Su solicitud podrá realizarse desde la página web del SEPE cumplimentando la documentación requerida.
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