La popularización de los pagos con tarjeta han supuesto un verdadero punto de inflexión. Además, con las prestaciones que ofrecen las aplicaciones de banca electrónica, que permiten integrar la tarjeta de débito o crédito personal al propio dispositivo móvil, hace que los pequeños comercios hayan integrado multitud de datáfonos o dispositivos TPV para realizar estos pagos. Nada más se efectúan estas transacciones, el aparato electrónico emite un pequeño resguardo, popularmente conocido como "copia", donde se recoge este movimiento.
Es por lo que cuando vamos de compras, nos terminamos cansando de escuchar la frase de: "¿Quieres copia?" La emisión del resguardo que el terminal imprime hace que el cliente elija entre solicitar su copia, o no. Tal vez no los solicites por una buena acción con del medio ambiente, o porque se terminan acumulando en el fondo de nuestra cartera hasta el punto de olvidar las compras que hiciste en las semanas previas. Sin embargo, convendría revisar siempre el importe que nos ha sido cargado a nuestra cuenta, y que se haya indicado la cantidad adecuada.
Mira lo que pagas
Esta siempre figura en el TPV, así que en caso de que procedas a rechazar la impresión de la "copia", asegúrate de que el trabajador del establecimiento te muestra la pantalla del dispositivo con la cuantía. En definitiva, se trata de mirar lo que pagas siempre a través de los popularizados, y cada día con más peso en la economía y los comercios, pagos 'contactless'. Uno de los mayores riesgos de este tipo de pagos es que se realiza el cargo sin necesidad de introducir el número PIN de la tarjeta. Este proceso tan automatizado hace que muchas veces hagas tus compras sin prestar atención a este tipo de cuestiones.
Además, los pagos en los que no se solicita el código PIN están limitados a la cuantía de hasta 50 euros. De tal manera que si se introduce un importe superior, se pedirá automáticamente la clave numérica de la tarjeta para que sea introducida por el cliente. Así, al mirar la pantalla directamente se está comprobando la cantidad que se tiene que pagar. En este sentido, el Banco de España resume esta serie de recomendaciones a los clientes para que no sufran estafas a través de los pagos 'contactless':
- Una vez se procede al pago, revisar siempre la cuantía de dinero que figura en la pantalla.
- En caso de guardar el ticket de compra del comercio, identifica si el importe que se ha cargado en la tarjeta coincide con el de la propia compra. Además, este se puede pedir de forma electrónica.
- Verifica los cargos de la tarjeta en tu cuenta para controlar de manera periódica los gastos que realizas.
- Ponte en contacto con tu identidad para ver si existe la posibilidad de que se active una notificación vía SMS o a través de la aplicación de la banca electrónica en el móvil cada vez que se efectúe un cobro.
Un método que "ha llegado para quedarse"
Los pagos 'contactless' se han convertido en el método preferido para el 66% de los españoles durante las últimas semanas, marcadas por la crisis del coronavirus, según el último estudio de Mastercard, que apunta que el 78% de las transacciones en Europa se realiza ya a través de pagos sin contacto. El estudio apunta también que este método "ha llegado para quedarse", ya que el 75% de los encuestados españoles dice que continuará utilizando el pago sin contacto cuando pase la pandemia del coronavirus.
El método de pago 'contactless' más popular en España es el pago con tarjeta sin contacto (79%), seguido del pago con el móvil (33%) y con dispositivos inteligentes como Fitbit o Garmin (5%). Asimismo, un 22% de los encuestados afirma que ha dejado de usar dinero en efectivo y un 40% manifiesta haber cambiado su tarjeta por una que permita los pagos 'contactless'. Nueve de cada diez españoles ha pagado la compra de esta forma, el 67% lo ha empleado en las farmacias y el 37% también en otras tiendas. Entre las principales razones para adoptar este método de pago, los consumidores citan la higiene (85%) y su facilidad (88%).
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