RWE reduce hasta marzo el beneficio neto un 36 %, a 838 millones de euros

Fráncfort (Alemania), 14 may.- La compañía alemana de suministro energético RWE redujo en el primer trimestre del año el beneficio neto a 838 millones de euros, un 36 % menos que en el mismo periodo de 2013, por la suavidad del invierno en Alemania y la crisis de la generación convencional de electricidad.

RWE informó hoy de que la ganancia operativa disminuyó entre enero y marzo un 18 %, hasta 1.900 millones de euros.

Asimismo la facturación cayó en el mismo periodo un 9 %, hasta 14.700 millones de euros, y también se redujeron notablemente en el primer trimestre las ventas de gas (18,8 %) y de electricidad (5,5 %).

La generación de electricidad se redujo en el primer trimestre un 16,8 % y por ello RWE vendió en el mercado mayorista menos electricidad de sus propias centrales.

"Incluso cuando el primer trimestre refleja, en la medida esperada, nuestro difícil entorno energético desde el punto de vista económico, el balance es positivo", dijo el presidente de RWE, Peter Terium.

Destacó la venta de la empresa de exploración y producción de petróleo y gas RWE Dea y la revisión de precios de los contratos de adquisición de gas con Gazprom.

"Hemos encontrado una solución que asegura que no se produzcan pérdidas en el resultado hasta la próxima revisión en junio de 2016", dijo Terium respecto al acuerdo con la compañía rusa.

La venta de RWE Dea hace necesario un ajuste de los pronósticos para 2014, según la compañía alemana.

RWE va a cerrar más centrales eléctricas de generación convencional de las que había anunciado inicialmente por la baja tasa de utilización y los bajos precios mayoristas de electricidad.

El director de Finanzas de RWE, Bernhard Günther, dijo que "los bajos precios de la electricidad dejan sus huellas de sangre en el balance".

RWE prevé ahora apagar todas las centrales con un volumen de 7,4 gigavatios, lo que afecta a centrales de gas y representa una décima parte del consumo central alemán.

Anteriormente la compañía quería apagar las centrales de 6,6 gigavatios.

La crisis en la generación convencional de electricidad crea dificultades para las compañías alemanas de suministro energético. como se reflejó en las cuentas de E.on, que redujo en el primer trimestre el beneficio neto subyacente un 13 %, hasta 1.220 millones de euros, frente al mismo periodo de 2013.

RWE incrementó en el primer trimestre el endeudamiento neto un 2,4 %, hasta 31.476 millones de euros, en comparación con el primer trimestre de 2013.

Además, invirtió en el mismo periodo 898 millones de euros, 131 millones de euros más, en la ampliación y modernización de capacidades de generación de electricidad.

RWE pronostica que la venta de RWE Dea al fondo de inversión privada LetterOne, del oligarca ruso Michail Fridman, por 5.100 millones de euros, reducirá el endeudamiento a unos 26.000 millones de euros a finales de 2014 (30.700 millones de euros un año antes).

La energética prevé una ganancia operativa entre 3.900 y 4.300 millones de euros y un beneficio neto de entre 1.200 y 1.400 millones de euros para este año.

Las acciones de RWE lideraban las caídas en la Bolsa de Fráncfort y perdían un 2,5 %, hasta 26,94 euros, hacia las 12.25 horas GMT.