Dublín, 10 abr.- La aerolínea irlandesa de bajo coste Ryanair divulgó hoy una campaña publicitaria para destacar las mejoras introducidas en su servicio de atención al cliente, su punto débil durante años, y continuar con su proceso de lavado de imagen.
El proyecto, valorado en seis millones de euros, fue presentado hoy en Irlanda, Reino Unido, Italia y España e incluye material para las televisiones, medios digitales, redes sociales, prensa y vallas publicitarias, informó hoy la compañía en un comunicado.
La campaña, que durará cuatro semanas, mostrará los "nuevos productos y servicios" de Ryanair, que incluye la posibilidad de reservar asiento o de llevar una segunda bolsa de mano "gratis".
También se destacará la "mejorada" página web de la aerolínea, líder en Europa del sector "low-cost", que fue presentada la pasada semana y permite, por ejemplo, reservar un vuelo con "solo cinco golpes de ratón", frente a los diecisiete que se necesitaba antes.
Los anuncios publicitarios en prensa o redes sociales, explicó Ryanair, están diseñados para reforzar la filosofía de la compañía de Dublín, que resume con el eslogan "Bajas tarifas. De forma sencilla".
La campaña para las televisiones se compone de varios anuncios filmados en el aeropuerto londinense de Stansted que destacan las mejoras adoptadas para suavizar su imagen, mientras suena el tema "Destination Anywhere" del grupo Marvelettes.
El director de márketing de Ryanair, Kenny Jacobs, aseguró hoy que la empresa ha efectuado "avances significativos" en su servicio de atención al cliente y que esta campaña aspira a que se corra la voz en toda Europa sobre la existencia de una "mejorada Ryanair".
Con humor, tres vídeos difundidos hoy, de unos 20 segundos de duración, presentan una imagen relajada de una mujer que lleva dos bolsas de mano, del proceso de reserva "online" o del embarque, que evita filas y tumultos gracias a la asignación de asientos.
La competitividad en el mercado de vuelos económicos, sobre todo, de compañías como la británica easyJet y la española Vueling, ha obligado a Ryanair a reaccionar con reflejos a los cambios que atraviesa el sector, según ha reconocido su director ejecutivo, Michael O'Leary.
El directivo, conocido por su estilo agresivo, prevé que con este lavado de imagen la aerolínea continuará liderando el mercado "low-cost" y que llegará a transportar más de 84 millones de pasajeros al año.
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