Salgado admite que se pueden perfilar más las causas del despido objetivo

La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, admitió este jueves que la reforma laboral convalidada en el Congreso será susceptible de cambios durante su tramitación parlamentaria, momento en que se podrían perfilar aún más las causas del despido objetivo, con una indemnización de 20 días por año trabajado.

"O algunas otras cuestiones", señaló Salgado en declaraciones a TVE recogidas por Europa Press, donde aseguró que el Gobierno está esperando las propuestas de los distintos grupos políticos, que tienen que poner ideas "encima de la mesa" si quieren mejorar el texto que se convalidó en el Congreso.

Confirmó que algunos grupos piden que se detallen más las causas del despido objetivo, aunque desde el Gobierno se piensa que un detalle mayor puede dificultar el propio margen para usar este despido. Además, aseguró que los elementos principales de la reforma, que pasan por aumentar la flexibilidad del mercado y hacer frente a la dualidad del mismo, "están bien abordados", por lo que no cabe esperar grandes cambios.

Negó que la reforma esté orientada a facilitar el despido, tal y como denuncia el PP, al tiempo que consideró que las empresas no deben "temer" las posibles modificaciones porque los decretos leyes son válidos desde que se publican en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y porque el Gobierno intentará acortar el periodo de tramitación de enmiendas.

Rechazó también que existan discrepancias con el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, en relación con la contratación temporal, ya que el decreto es "absolutamente prudente" en este sentido, tal y como pide el gobernador. "No me parecen (discursos diferentes)", indicó.

En cuanto a la abstención del socialista Antonio Gutiérrez en la votación del martes en el Congreso, la vicepresidenta económica aseguró que "comprende" su posición, aunque no la comparte porque se trata de una "buena" reforma del mercado de trabajo. Aún así, aseguró que es el Grupo Parlamentario Socialista el que tiene que tomar la decisión que considere oportuna. "A mi me gustaría seguir contando con él", subrayó.

En otro orden de cosas, se refirió a la reforma de pensiones en la que trabaja el Pacto de Toledo, y aseguró que el Gobierno está esperando la propuesta de la Comisión para comenzar a elaborar el proyecto de ley. A su parecer, la propuesta que envió el Ejecutivo, que invitaba a alargar la edad legal de jubilación a los 67 años, estaba muy "razonada", aunque queda mucho tiempo por delante porque los problemas no se empezarán a ver hasta el 2030-2035.

Preguntada por los Presupuestos Generales del Estado, Salgado aseguró que no contempla la posibilidad de que no se aprueben en el Congreso y que haya que prorrogar los de 2010 porque el texto que presentará el Ejecutivo será "muy razonable" y permitirá tanto cumplir con el objetivo de reducir el déficit como seguir financiando un importante gasto social.

Recordó que incluirán algunos ajustes, como la reducción de las inversiones o la oferta pública de empleo, y que pueden contener algún cambio fiscal que afecte a las personas con más recursos. Sin embargo, no quiso "cometer el error" de hablar de figuras tributarias concretas antes de que se planteen oficialmente.

Sin problemas con la deuda

Sobre la evolución de la deuda y los posibles problemas que puede tener España para financiarla en el mes de julio, Salgado admitió que en ese mes hay que hacer frente a un pago importante de amortización de deuda, pero recordó que también hay más ingresos por algunos impuestos y que, en cualquier caso, todo está previsto en el calendario. "No va a haber ningún sobresalto", indicó.

En este sentido, señaló que Europa ha respaldado los planes de España para reducir el déficit y consideró a Grecia un "mal ejemplo" en las comparaciones porque no decía la verdad en sus estadísticas y tenía déficit incluso cuando crecía, algo que no ocurre en España. "Esto es lo que nos separa de Grecia", añadió, tras recordar que la economía española está "muy saneada y diversificada".