Los orígenes de esta reunión profesional, que este año acogerá unos 7.300 expositores y 300.000 visitantes, se sitúan en la Edad Media y en la invención, no muy lejos de allí, de la imprenta por Johannes Gutenberg.
Meses después de los atentados contra Charlie Hebdo en Francia, "la libertad de expresión será un tema importante", explica el director del evento, Jürgen Boos.
Se nota "una fuerte politización este año", agrega Boos.
La rueda de prensa de apertura marcará el martes el tono del Salón, con una intervención del escritor británico Salman Rushdie, objeto de una fetua del ayatolá iraní Jomeini en 1989 por su obra "Los versos satánicos".
Más de 25 años después, su intervención entre fuertes medidas de seguridad molesta a Irán, que decidió el miércoles pasado boicotear el salón.
Irán exhortó además al resto de los países musulmanes a que hagan lo mismo, pese a que Indonesia, el país con más musulmanes del mundo, es el invitado de honor de la feria.
El tema de las barreras, de las fronteras y de la lucha contra el extremismo también protagonizará los debates durante tres días de unos veinte escritores de todo el mundo, bajo la batuta de la danesa Janne Teller.
Por segundo año consecutivo, esta iniciativa denominada "Frankfurt Undercover", y no pública, busca hacer emerger un manual de ideas destinado especialmente a los dirigentes políticos.
Los refugiados, numerosos en Alemania por la crisis migratoria actual, tendrán las puertas abiertas del salón con entradas gratuitas y visitas guiadas organizadas en función de su país de origen.
La cuestión del acceso a la cultura en los campos de refugiados centrará una conferencia en Fráncfort, donde la federación de escritores alemanes lanzará también un llamado a una mayor solidaridad con las personas que huyen de la violencia en sus países.
Aunque los pasillos centrales del congreso de Fráncfort no se estremecerán este año como es habitual con el anuncio del premio Nobel de Literatura, otorgado el jueves a la escritora bielorrusa Svetlana Alexievich, numerosos autores de renombre internacional seguirán presentado sus obras.
El famoso escritor británico Ken Follett, quien presentará la adaptación en videojuego de su celebérrima novela "Los Pilares de la Tierra", compartirá salón con la chilena Isabel Allende, el danés Jussi Adler-Olsen o el antropólogo británico Nigel Barley.
La autora indonesia Laksmi Pamuntjak presentará su última novela "The Question of Red", una historia de amor durante la violenta represión contra los comunistas en los años 1960 en Indonesia. Ella será, junto a la feminista Ayu Utami o Eka Kurniawan, una de los setenta autores que llevarán a Fráncfort la literatura de su país.
Más allá de este archipiélago de 17.000 islas, el salón editorial pondrá de relieve toda Asia con un mayor número de expositores procedentes de Malasia, Tailandia, Vietnam o Singapur. Filipinas acudirá por primera vez.
Francia, que será la invitada de honor en 2017, reforzará también su presencia, al igual que Brasil y Argentina.
El Salón de Fráncfort también será el escenario para abordar los cambios en el sector de la edición que, pese a continuar debilitado, aún cuenta con unos 114.000 millones de euros (129.000 millones de dólares) de facturación cada año a nivel mundial.
Entre los cambios figuran la concentración creciente de las editoriales, reforzada con el nacimiento en 2013 del gigante Penguin Random House, la desaparición de grandes cadenas de librerías, y la coexistencia siempre tensa del papel con la versión digital.
Presente en varias mesas redondas, Amazon centrará de nuevo la atención, máxime cuando este gigante de venta por internet se ha convertido en un actor ineludible del universo del libro.
El salón de Fráncfort, que se celebra del 14 al 18 de octubre, está reservado en un primer momento a los profesionales, antes de abrir sus puertas al gran público durante el fin de semana.
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