El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha lanzado varios anuncios en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este martes. Por un lado, ha adelantado la aceleración en el proceso de vacunación durante las próximas semanas y, por otro, en el terreno puramente económico, ha confirmado lo que ya deslizó este lunes la vicepresidenta económica, Nadia Calviño: que el Ejecutivo va a revisar a la baja las previsiones de crecimiento para 2021, tras un inicio de año poco favorable para la economía y el empleo.
El líder del Ejecutivo ha adelantado por sorpresa la actualización de previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI), que calcula que el PIB repuntará un 6,4% este año, frente al 5,9% que estimó en su anterior previsión. Sin embargo, tras destacar que esa cifra situaría a España como "la economía desarrollada que más va a crecer en 2021, junto con Estados Unidos", ha admitido que el Gobierno se verá obligado a rebajar sus propias previsiones para acoplarlas a ese escenario, que comparten otros organismos como el Banco de España, que calcula un avance del 6%.
Será un recorte importante, habida cuenta de que el cuadro macroeconómico dibujado por el Gobierno español contempla un crecimiento inercial del PIB del 7,2% este año, que se eleva hasta un 9,8% gracias a las ayudas europeas. Aunque el presidente no ha adelantado cifras, sí ha situado como referencia esos escenarios planteados por el FMI o el BdE. En el caso del Fondo, mejora su proyección para este año en medio punto, al 6,4%, mientras el Banco de España revisó a la baja las suyas recientemente tras empeorar su pronóstico en los primeros compases del ejercicio.
Precisamente, el presidente ha reconocido que la tercera ola de la pandemia ha tenido un "impacto considerable" en los dos primeros meses del año -no así en el tercero, cuando se ha producido una cierta reactivación económica relacionada con relajación de restricciones, tal y como han reflejado los datos de paro y afiliación conocidos este martes- y ese efecto tendrá su traducción sobre la revisión de las previsiones para el conjunto del ejercicio, como ha indicado él mismo, a la baja. Aun así, ha asegurado que aunque España está aún "lejos" de la recuperación total, "poco a poco" se están viendo los efectos de la reactivación económica en estos últimos meses.
Plan de Recuperación
Al crecimiento previsto, en ese entorno del 6,4%, contribuirán, según ha explicado, las ayudas aprobadas en el Consejo de Ministros, a las que se unirá el Plan de Recuperación y Resiliencia, que tendrá luz verde el próximo martes. Hay que recordar que se trata del proyecto de reformas que el Gobierno ha comprometido con la Comisión Europea para acceder a los fondos del Next Generation EU. Todo ello, junto con la vacunación, "va a situar un horizonte de recuperación más consolidado", ha añadido.
Aunque hay que insistir en que el presidente no ha trasladado ninguna cifra concreta, sí ha enmarcado la revisión en las proyecciones que publica este martes el FMI. De materializarse esa rebaja de más de tres puntos, supondría un recorte importante respecto a unas previsiones de inicio optimistas por parte del Gobierno español. El inicio del año no ha ido lo bien que se esperaba, tanto por la tercera ola de la pandemia como por los efectos de la borrasca Filomena y los analistas, como la AIReF, ya dibujan una caída del PIB del 1,4% entre enero y marzo que inevitablemente tendrá su impacto en el conjunto del año.
Ante este escenario adverso, Calviño, que maneja bien los indicadores adelantados, ya abría la puerta este lunes a rebajar sus previsiones de crecimiento en el próximo cuadro macroeconómico que debe enviarse a la Comisión Europea antes de que finalice este mes. La vicepresidenta admitía la existencia de factores que propiciarían "más bien" una revisión a la baja, un extremo que ha sido confirmado este martes por el presidente Sánchez.
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