Sector agrario argentino estudia realizar cese de comercialización

Buenos Aires, 10 jun.- Las cuatro mayores patronales agropecuarias de Argentina evalúan convocar a un cese de comercialización de granos y ganado para protestar contra las políticas del Gobierno de Cristina Fernández hacia el sector, confirmaron hoy representantes del campo.

Los alcances de la medida de fuerza serán discutidos este martes entre una reunión entre los dirigentes de la Sociedad Rural Argentina (SRA), las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), la Federación Agraria (FAA) y la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro).

"Esto no es un paro intempestivo, de un día para el otro. Hicimos nueve asambleas en todo el país, le pedimos a la presidenta que nos convoque. Ahora viene el paso del paro y seguramente seguirán las acciones gremiales en tanto no tengamos soluciones", dijo hoy el presidente de la SRA, Luis Miguel Etchevehere.

En declaraciones a radio La Red, de Buenos Aires, Etchevehere recordó que en los últimos años "desaparecieron unos 60.000 productores" agropecuarios por culpa de las políticas que el Gobierno ha llevado adelante en el sector.

El titular de la Sociedad Rural sostuvo que por la falta de competitividad y la presión tributaria "casi todas las producciones de Argentina hoy son inviables".

"Esta presidenta se ha ensañado con los productores. No se puede seguir produciendo bajo estas condiciones. No esperamos un decreto de la felicidad que mágicamente haga a todos los productores felices, pero al menos que se reconozcan los problemas", dijo por su parte el presidente de la Federación Agraria Argentina, Eduardo Buzzi, en declaraciones a radio Mitre, de Buenos Aires.

Las cuatro entidades agrarias mantuvieron en 2008 una dura disputa con el Gobierno de Fernández por los impuestos a las exportaciones de granos, conflicto que incluyó varias huelgas de comercialización y bloqueos de carreteras.

Argentina es uno de los mayores productores y exportadores mundiales de granos y cerrará esta campaña agrícola con una cosecha de 102,6 millones de toneladas, la segunda mayor de su historia, según datos del Ministerio de Agricultura.