Arturo Fernández: "queríamos quitarnos eso de encima de la forma más rápida"

SERVIMEDIA

El presidente de la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM) y vicepresidente de la CEOE, Arturo Fernández, aseguró hoy en su declaración como imputado en la Audiencia Nacional que los antiguos consejeros de Bankia aprobaron en mayo pasado las nuevas cuentas de la entidad, en las que se reconocía un agujero de 2.979 millones de euros, con una actitud de "vamos a quitarnos esto de encima de la forma más rápida posible".

"Si Deloitte dice que están bien las cuentas yo no voy a leerlas", dijo el imputado sobre las primeras cuentas de Bankia, aprobadas el pasado 28 de marzo y en las que se aseguraba que la entidad tenía unos beneficios de 300 millones de euros. Algunos letrados han tildado la comparecencia de Fernández ante el instructor de la causa, el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, de "jocosa" pero "escueta y llena de lugares comunes".

El presidente de la patronal madrileña aseguró asimismo que él y su mujer invirtieron un total de 60.000 euros en acciones de Bankia en su salida a bolsa, que tuvo lugar en julio de 2011, y añadió que ahora su esposa le reclama sus 30.000 euros.

Fernández Álvarez, que dijo no tener conocimientos técnicos y que su papel en Bankia era simplemente servir de puente entre el banco y la patronal madrileña, señaló asimismo que le "sonaba la cara" del auditor interno pero que no le conocía, según explicaron fuentes jurídicas.

Acusaciones contra Deloitte

El exconsejero de Bankia y asesor del Royal Bank of Scotland Alberto Ibáñez González cargó por su parte las tintas contra el auditor Deloitte en su declaración esta mañana como imputado ante el juez Andreu. Acusó en este sentido a Deloitte de haber dado largas y haber adoptado una actitud pasiva con respecto a las cuentas de la entidad.

Ibáñez González, uno de los primeros imputados que reconoce haber tenido un trato directo con los auditores, explicó que, tras un primer contacto, los responsables de Bankia se reunieron con representantes de Deloitte el pasado 27 de marzo, un día antes de aprobar las cuentas que reflejaban beneficios.

El imputado dijo que en esa reunión los auditores no les alertaron de problemas con las cuentas y que únicamente subrayaron como asuntos pendientes algunos aspectos contables como los créditos fiscales. Ibáñez Álvarez dijo que las cuentas de marzo se aprobaron sin el perceptivo informe auditor por la especial complejidad de la integración de las siete cajas de ahorro que formaron Bankia.

El exconsejero reveló que a lo largo del mes de abril se recibieron dos correos electrónicos en los que Deloitte aseguraba que no había ningún problema con los números. También indicó que se propuso a finales de abril una reunión con los auditores que fue finalmente cancelada por la Secretaría del Consejo de Administración por problemas de agenda.

Ibáñez Álvarez ha explicado que compró 20.000 euros de acciones de Bankia.

CRISIS ECONÓMICA

La exconsejera Carmen Cavero Mestre dijo por su parte en su declaración como imputada que el cambio radical de las cuentas de Bankia se debió a una modificación "de las perspectivas" provocada por el deterioro general de la economía española.

Esta imputada, exconsejera del Banco Santander y antigua directora desarrollo Morgan Stanley, también señaló que el Consejo de Administración solo tuvo conocimiento de los nuevos números el 25 de mayo, el mismo día en que se aprobaron esas cuentas.

El cuarto imputado que declaró esta mañana ante el juez instructor, José Manuel Fernández Norniella, expresidente CSC y antiguo secretario de Estado de Comercio en el Gobierno de José María Aznar, también acusó a Deloitte de dilatar en el tiempo la presentación de su informe sobre la contabilidad de Bankia.

Dijo haber estado presente cuando los representantes de Deloitte le dijeron al antiguo presidente de Bankia Rodrigo Rato que tendrían listo el informe para el 7 de mayo, una semana después del plazo legal para presentarlo.

Fernández Norniella, el único consejero que dimitió junto a Rato el pasado 9 de mayo, dijo que lo hizo por "fidelidad" y "congruencia" con el proyecto. También explicó que Rato dimitió al sentirse "desautorizado".

Los exconsejeros que comparecieron hoy ante el juez fueron increpados a su salida de la Audiencia Nacional por un grupo de afectados por las preferentes que corearon lemas como "¿dónde están nuestros ahorros?" o "el de la patronal, a la cárcel con Ferrán".